La Ley Orgánica 2/2011 reformó algunos aspectos importantes de la Ley Orgánica de Régimen Electoral General. De estos quisiera hablar un poco sobre la reforma de las campañas electorales, especialmente sobre las normas que refuerzan el concepto de ‘campaña electoral’. Esto se ha vendido como un modo de reducir los gastos electorales, pero los grandes gastos electorales están controlados desde hace tiempo (prohibición de publicidad pagada en televisión) y los que quedaban han sido dejados como estaban (anuncios en periódicos e inserciones en radio).

El periodo electoral, el tiempo que media entre la convocatoria y la campaña, es esencial para un proceso electoral ya que los ciudadanos entran en clave electoral y se ponen a decidir su voto. Luego se saca toda la artillería, en la campaña propiamente dicha, el ciudadano se satura rápidamente y ya no presta demasiada atención.

Un partido nuevo o un partido que anteriormente no haya obtenido representación lo tiene todavía más difícil en cuanto que la notoriedad durante el mandato se la llevan los ‘insiders’ y que a él se le prohíbe comenzar antes la campaña para compensar su peor punto de partida.

Sé que este pensamiento es impopular y que lo ‘buenista’ es decir que en tiempos de crisis hay que evitar que la gente gaste dinero en publicidad y dinamice la economía al sector, para que los que ya están dentro nunca tengan el peligro de estar fuera.

Posted originally: 2011-05-09 09:00:58