Un notario contratado por la empresa que ha llevado a cabo los trabajos de demolición y que trató de comprar su casa para la construcción de nuevas viviendas ha certificado esta mañana el "peligro de derrumbe" del número 7 de la calle Fernández
Hasta hace tres días el número 7 de la calle Fernández, bajando la cuesta de los Remedios (Teniente Arrabal), no tenía ningún problema más allá de la antigüedad del inmueble. Hoy sus propietarios se enfrentan a su desalojo. El motivo: la demolición del edificio contiguo, que da a Teniente Pacheco, su paralela por debajo, que ha causado daños en la estructura.
Ha sido un notario -contratado por la empresa que construirá nuevas viviendas en la parcela ahora vacía- el que ha certificado el "peligro de derrumbe" y notificado la posibilidad de un desahucio forzoso a la humilde familia que vive en este pequeño edificio que ha quedado rodeado por los escombros.
La Policía Local y una unidad del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) también se han personado allí en las horas del mediodía para tratar de convencer a los habitantes del inmueble para que lo abandonen.
Cuentan que se habían negado a vender su propiedad a la promotora y ahora se niegan a abandonar su hogar.
Los trabajos para echar abajo el edificio comenzaron hace meses, con el desmantelamiento de la techumbre. Desde entonces la ruina lucía 'destapada', pero los vecinos no habían notado desperfectos en sus viviendas.
Hace tres días la calle quedó cortada y las palas entraron para terminar de derruir lo que quedaba del inmueble. Fue entonces cuando las grietas aparecieron en la fachada del número 7 y comenzaron a extenderse por sus muros.
La vía ha sido reabierta al tráfico en la mañana de este viernes y todo parecía volver a la normalidad en la manzana, pero para esta familia los problemas parece que no han hecho más que empezar.