La Guardia Civil ha detenido este 22 de mayo en la zona de preembarque del recinto portuario al conductor y al copiloto de un Mercedes C-180 de matrícula portuguesa cuando ambos intentaban subir a bordo de un ferry portando consigo 90 kilogramos de hachís.

Dadas las sospechas levantadas por los individuos, los agentes desplegados en la zona decidieron emprender el habitual protocolo de inspección. Inmovilizado el vehículo, los mismos beneméritos realizaron un exhaustivo reconocimiento sobre este, logrando detectar la presencia de varios bultos de sustancias estupefacientes a los pocos minutos de iniciar la búsqueda.

Al parecer, la carga permanecía oculta "en un doble fondo practicado a los laterales" del remolque que el turismo llevaba adherido tras de sí. Dada la coyuntura, los guardias civiles detuvieron de inmediato a los ocupantes del automóvil; los dos, de nacionalidad portuguesa.

Según ha trasladado el instituto armado a través de un comunicado, el pesaje exacto de la carga ha sido de 90.000 gramos. Esta ha resultado ser -dice el Cuerpo- "resina de hachís".

Practicadas las diligencias oportunas, los arrestados ya han sido puestos a disposición de la autoridad judicial, ante la que habrán de responder en breve por un presunto delito contra la salud pública.

Como siempre, la sustancia intervenida ha sido trasladada al Área de Sanidad de la Delegación del Gobierno, donde permanecerá por tiempo indefinido a la espera de ser destruida. El turismo, por su parte, también ha sido puesto a disposición del juez encargado de instruir el caso.