El caso del apuñalamiento de un joven en la zona de La Ribera-Fuente Caballos durante la noche del 25 de julio se enreda entre silencios y generalizaciones. Lo que inicialmente se quiso presentar por parte de interesados como el asalto de un grupo de inmigrantes a un turista adolescente que terminó en el Hospital va derivando hacia un conflicto entre ceutíes más o menos conocidos que se encontraron de madrugada en la playa y terminaron a puñetazos con un navajazo incluido tras una disputa interna.

Sobre el primer menor detenido y puesto en libertad tras pasar por el Juzgado no se dictaron medidas de restricción de libertad porque, según fuentes judiciales, nadie, ni la víctima, le identificó expresamente como autor de los golpes o la agresión con arma blanca, hechos enmarcados en un presunto delito de homicidio en grado de tentativa. Con alrededor de una decena de arrestados o identificados en la 'Operación Murciélago', tres personas, un menor y dos adultos, han sido recluidos hasta ahora a la espera de juicio.

La madre de Nadir M., el chico de 15 años encerrado en el Centro de Reforma de Punta Blanca, ha exigido "que se haga justicia” y ha denunciado las medidas que se le han impuesto “sin ninguna prueba que le señale como responsable o autor de los hechos que se investigan”. Según Hanan Odda “los verdaderos autores de la agresión, con cuya víctima nos solidarizamos, siguen libres e incluso pueden haber causado con sus declaraciones la privación de libertad de mi hijo y de otro chico al que se ha encarcelado”.

Paradójicamente, ambos llegaron junto a una pareja con el apuñalado a la playa antes de que se desatase la violencia en un clima que, de acuerdo con las imágenes recabadas en distintos puntos, revelaba cordialidad. “Estamos en pleno verano y todos querían aplacar a la opinión pública debido a la presión generada por el suceso, pero mi hijo solo es un niño y hay muchas formas de corregir que un menor esté en la playa a media noche sin enviarlo a un correccional sin que podamos saber nada de él desde hace una semana”, lamenta la progenitora, que se “solidariza” con el denunciante y espera que se localice a los verdaderos culpables.

“El agredido no ha identificado en ningún momento a mi hijo como la persona que le apuñaló, ni siquiera que le golpeó, más allá de que formaba parte del grupo de amigos que fueron juntos a la playa", advierte. La madre ha pasado este viernes con el padre del otro joven encarcelado por los Juzgados con motivo de la toma de declaración de varias personas, que no ha arrojado novedades para la situación de ambos.

“A mi hijo con 15 años lo han encerrado porque la mía es una familia monoparental y con el argumento de que se corre el riesgo de que podría no acudir al juicio a pesar de que no existe ninguna declaración o prueba concluyente y de que fui yo la que lo llevé a declarar a petición de una agente que lo conoce del barrio de toda la vida”, ha cuestionado. “La víctima ha dado una descripción del autor de la agresión que no se corresponde de ninguna forma con mi hijo, a quien me han quitado destrozando a toda la familia para calmar a la opinión pública por unos sucesos los que esperamos que se haga justicia real”, ha añadido.

“Nadir no tiene antecedentes y forma parte de una familia con buena reputación: lo que está sucediendo es absolutamente indignante y no se puede tolerar que los verdaderos responsables de lo que pasó sigan en la calle e incluso hayan podido causar su encierro con sus declaraciones”, ha advertido Odda, que pide “que tanto la Policía como la Justicia hagan su trabajo y encuentren a los verdaderos autores de la agresión”.