AUTO JUDICIAL

A Mohammad Ali le reventaron la cabeza con un bate por vídeos en su móvil de tendencia sexual

A Mohammad Ali le reventaron la cabeza con un bate por vídeos en su móvil de tendencia sexual
 Momento en el que el detenido es introducido en un furgón policial para su traslado al juzgado
Uno de los detenidos por el crimen en el momento de ser trasladado al juzgado desde la comisaría el pasado enero./archivo
El Juzgado de Instrucción y Primera Instancia Número 6 ha ratificado este mismo lunes la prisión sin fianza para el adulto acusado junto con dos entonces menores del homicidio del menor desaparecido en enero de 2022. En el escrito se relatan los hechos. Los investigados volvieron al lugar del crimen al día siguiente

El Juzgado de Instrucción y Primera Instancia Número 6 de Ceuta ha ratificado este lunes la prisión provisional sin fianza para el adulto acusado del homicidio y tal vez asesinato del menor Mohammad Ali desparecido en enero de 2022, ratificando así la decisión tomada por el Número Uno el pasado 1 de febrero. En el auto se establece un relato de los hechos por los que se acusa a este adulto y a dos entonces menores, una chica y un chico. El autor material del asesinato del joven, entonces a punto de cumplir los 18 años, Mohammed Ali, sería precisamente el menor que fue enviado al Centro de Reforma de Punta Blanca, según se desprende del relato que se recoge en el auto de ratificación y en el que decretó en principio su prisión a principios de mes.

Los tres, el adulto y los dos menores, habían quedado con Mohammad Ali el 13 de enero de 2022 con la intención de acabar con su vida y lo que le queda por discernir a la investigación, según se deduce de los autos, es si se está ante un homicidio o un asesinato con premeditación y alevosía.

El adulto habría sido el que puso el coche para llevarlos a García Aldave e incluso una vez allí habría retenido al joven que moriría instantes después de un golpe en la cabeza con un bate de béisbol, e incluso le habría cerrado el paso con el coche cuando trató de huir.

Y el móvil sería que los dos jóvenes tenían un conflicto con Mohammad Ali. El luego homicida, según la imputación de hechos del auto, aún por demostrar en juicio, no quería salir del armario.

“De común acuerdo decidieron verse con Mohammad Ali, por motivo de tener conocimiento de que Mohammad Ali almacenaba en su terminal de telefonía móvil imágenes y vídeos en los que (el menor de los tres encausados) exhibía su orientación sexual, pretendiendo éste ocultarla y que no se supiera la misma en su familia por que consideraba que no la aceptarían”, recoge el auto.

Así quedaron con él, lo convencieron para subirse al coche y lo llevaron a García Aldave, una discusión con la chica del trío desató la agresión. Mohammad Ali “trató de escapar, pero fue alcanzado por el otro menor, quien le golpeó con un bate de béisbol en la cabeza dándole muerte, tras lo que los tres investigados abandonaron el lugar dejando allí el cuerpo sin vida de Mohammad Ali”, prosigue el auto.

Sabían que lo habían matado, según la investigación porque al día siguiente volvieron al lugar de los hechos y manejaron la posibilidad de comprar alcohol para quemar el cuerpo.

La Policía ha podido probar mediante la geolocalización de sus terminales móviles que los tres y el propio Mohammad estuvieron en la zona de García Aldave, cerca del Monte Tortuga tanto el día 13 como el día 14. En las testificales tanto la chica como el adulto han hecho alusión a la intención de comprar alcohol, lo que hace deducir a los investigadores que sabían que lo habían matado y no lo habían dejado simplemente malherido en el monte.

“De las declaraciones practicadas se desprende que (el adulto) junto los otros dos investigados en la jurisdicción de menores, dejaron atrás el cuerpo sin vida de Mohammad Ali, abandonándolo, con plena conciencia del luctuoso y letal resultado de sus actos”, afirma el auto.

Al adulto además de su participación como conductor le pueden acabar imputando la premeditación y alevosía toda vez que cargaron el bate en casa del supuesto autor material del asesinato y además un palo. Ambas armas homicidas las habría sacado del coche el propio adulto para entregárselas a su amigo menor, según el relato de la joven ante la Policía.

Además de la geolocalización de los teléfonos, la Policía cuenta con dos testigos, amigos ambos de la menor, a los que ésta habría confesado el crimen y su arrepentimiento, según se recoge en el auto.

Además, la Policía tiene claro que Mohammad Ali no tenía intención de irse de Ceuta, como se especuló durante mucho tiempo, dado que salió de casa sin documentación que le hubiera permitido coger un ferry o cruzar a Marruecos, sin tarjetas de crédito ni dinero para una fuga.

En Instagram consta además una conversación entre el asesinado y la menor previa a la cita mortal a la que acudió en la que ya mostró abiertamente sus sospechas de que acudía a una encerrona.

“Voy a avisar por si me pasa algo, me está oliendo algo raro esto… Te lo juro que si me haces una trampa no te voy a perdonar en la vida”, le escribió a su conocida antes de acudir a la cita.

En testificales previas uno de los acusados negó que finalmente Mohammad hubiera acudido el día fatídico a aquella cita.

A Mohammad Ali le reventaron la cabeza con un bate por vídeos en su móvil de tendencia sexual


Entrando en la página solicitada Saltar publicidad