El ministro Luis de Guindos, saludado por el entonces presidente del Eurogrupo, Juncker, en marzo de 2012/Reuters
Los 300.000 pequeños inversionistas atrapados en España por el timo de las preferentes se debaten desde esta semana entre intentar un acuerdo con el banco que le vendió las preferentes o llevar a la entidad ante los tribunales. El Gobierno y los bancos, bailando al son que marca la Unión Europea, han emprendido una potente campaña para empujar a los afectados a aceptar un arbitraje, que venden como la vía más "rápida y además gratuita" para recuperar algo del dinero invertido.
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Posted originally: 2013-04-21 08:23:00