Hola soy un ex trabajador de Punta Blanca. Tengo que decir cuando en el centro había pocos menores, que es en la mayoría de las veces, se trabajaba perfectamente, ya que las instalaciones lo permiten, puesto que no son las del año 2002, pero cuando entra un menor teóricamente problemático, un 90 por ciento de los trabajadores, dirección, equipo educativo, celadores y vigilantes de seguridad se amedrentan, por no decir otra cosa. Cuando toda va bien sólo se escuchan comentarios agradables por ejemplo se escucha: yo este mes me voy a Tailandia de vacaciones, otro que se va de crucero por el Mediterráneo, otro el 4x4 que se va a comprar, otro el ático que se ha comprado, en fin cosas bonitas, pero cuando hay un menor teóricamente problemático, ya son otros comentarios por ejemplo: que hay fugas (¿Qué hay fugas o se preparan las fugas?) por ejemplo el cinco de abril de 2007, se escapa por segunda vez el interno Zohaire, alias ‘el rubio’, pero se escapa por la venta de su habitación. Pero que en ese turno la educadora responsable, se encuentra dos limas del taller, que no se sabe como las ha metido en su cuarto, dado que cuando entra en talleres, antes de entrar en su cuarto, los celadores lo cachean de arriba abajo y a continuación los vigilantes de seguridad les pasa el detector de metales. Por lo que hay varios puntos que no se explica:
1º ¿Cómo logra entrar el material con el que en teoría parece ser que se fuga?

2º ¿Si la educadora responsable del turno se encuentra dos limas en el cuarto del fugado por que no lo cambia de habitación al interno el cual se fuga minutos después?

3º ¿Cómo que en el registro que se efectúa antes de la fuga, nadie se da cuenta de la ventana?

4º ¿Cómo que había preparadas las zapatillas del interno en el techo, justo arriba de su habitación, la cual se podía observar perfectamente, desde la ventana de dirección?

5º ¿Por qué se quedan las zapatillas dos días en el techo y casi nadie sospecha nada?

En fin, horas más tarde, algunos del 10 por ciento restante de los trabajadores en general, buscan al interno por toda la ciudad, lo encuentran y lo meten en un coche particular llevándolo de nuevo al centro, mala suerte para muchos, otra vez está ‘el rubio’ en el centro.