Durante la semana y en particular en estos últimos días se han publicado diversas noticias que merecen la pena ser comentadas y que son o han sido estudiadas por UPyD-Ceuta. Es por lo que como responsable del partido en Ceuta tengo la responsabilidad de comentar.

Por un lado, hay quienes siguen insistiendo, con toda la razón por cierto, en que Ceuta debe contar con un aeropuerto. UPyD ya dijo en su momento que para el Programa Municipal propondría algo al respecto. Como parece que se multiplican las propuestas en estos días, entiendo que debemos pronunciarnos. UPyD está estudiando la propuesta de construcción de un HIDROAEROPUERTO para Ceuta, y a continuación el inicio de las obras de un AEROPUERTO. Ya en el Plan de Dotaciones Básicas de 1983, el PSOE propuso en la zona de Benítez un aeropuerto. Aquello murió en el sueño de los justos, cambiando la dotación presupuestaria hacia otras cuestiones de obras públicas y hospitalarias. Los datos que barajamos, amén de que ya existió una pequeña presencia de hidroaviones en Ceuta, son más que rentables y además de total factibilidad. Pero no desvelaremos estas propuestas hasta que llegue el momento adecuado, esto es, cuando se hagan las propuestas para el Programa Municipal con la seriedad que nuestro partido trabaja.

Cambiando de tercio, lo que no puede comprenderse, es la situación del gobierno de la nación, por el que ya ni el diario oficial (léase EL PAÍS) da un duro. Cuatro millones doscientos mil parados según el gobierno. Cuatro millones y medio de parados según Eurostar, de los que un millón y medio no tiene prestación social alguna. Y además, según la encuesta de Metroscopia para El País, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tiene un problema de credibilidad: al 37% de los españoles no le inspira ninguna confianza y al 35%, poca. El 61% desaprueba sus medidas para hacer frente a la crisis, el 76% considera que llegan demasiado tarde y el 81% opina que el presidente está improvisando. Y el Comité Federal del PSOE le da su apoyo. En estas circunstancias un político serio dimitiría, o convocaría elecciones anticipadas. Y en eso estamos, en nuestra opinión deberán adelantarse las elecciones generales, o seguir hacia el abismo.

Y de la situación política de Ceuta, mejor no hablar mucho: Mohamed Alí afirma que "...jamás, haga lo que haga, me van a votar los ciudadanos no musulmanes..." Los que han conseguido esta fractura social, siguen trabajando para que ahonde, y no es precisamente Mohamed Alí. Son los que prometen y prometen para "arreglar la barriada de El Príncipe", son los que hablan de confraternidad de visita en mezquitas, en rezos colectivos, en celebraciones hindúes, etc... mezclando política y religión. Si a eso le sumamos el dogmatismo de numerosos devotos de cualquiera de las religiones, que les impiden desde vestir de una manera que pueda identificar a una ciudadana o acudir a una simple reunión porque tienen días enteros en barbecho, pues así nos va a ir en Ceuta: el dogmatismo, el fundamentalismo y la perversión del poder político funcionan a la par.

Y Melilla en la trigésimo-séptima Asamblea General de la Conferencia de Regiones Periféricas y Marítimas de Europa (CRPM), un foro en el que Ceuta no participa y cuyas resoluciones no son vinculantes para los órganos decisorios de la Unión Europea (UE), proponiendo esta semana en Suecia pedir “un trato similar al de región ultraperiférica” para Ceuta y Melilla a instancias del Ejecutivo de esta última ciudad, que sí toma parte en sus reuniones. UPyD ya propuso dicha consideración en boca de nuestro eurodiputado Sosa Wagner. Como siempre, cuando algo positivo se propone para la ciudad, UPyD lo apoya, aunque sea en este caso por denuncia de UDCE.

Carpe diem.