Tenemos un Gobierno que maneja al funcionariado a su antojo, el poco que hay. Tenemos un Gobierno que tiene que cerrar toda una dependencia, estadística, por su mala gestión, la misma mala gestión de las viviendas de Loma Colmenar. Pero luego, tenemos un Gobierno que, en vez de poner soluciones previsibles, organizadas y estables, actúa bajo el paragua de la impulsividad y la represalia. En esta vida cada persona interviene según su experiencia o modo de defensa.

Nadie le puede reprochar a José Antonio Carracao que diera, en un periodo breve de tiempo, su opinión de dos asuntos en los que se ha visto implicado involuntariamente. Primero por ir como testigo a tomar declaraciones sobre la supuesta lista fantasma y salir de los juzgados valorando el proceder del Partido Popular con una contundencia íntegra, mucha más categórica de lo expresado, en todo este tiempo, por cierta parte de la oposición. Segundo por defenderse de un traslado forzoso, en menos de tres horas, y sin tener en cuenta su trabajo hasta ahora avanzado, para hacer funciones no acordes a su categoría, y que tan gustosamente está desplegando. Por tanto, nadie le puede reprochar que, haciendo uso de su libertad de expresión, publicara una carta abierta atacando al Gobierno de la Ciudad, a sus políticas de juventud y, lo más importante, a la persecución mediática y personal que ha sufrido durante todo este tiempo.

Lo extraño de esto es que, a pesar de que ya no es Secretario General del PSOE de Ceuta, su presencia en la prensa hiera hasta el punto de que con todos los motivos que ha tenido Vivas para dimitir, Carracao sea su motivación. Sólo le hace falta una prueba para hacerlo. Pues bien, José Antonio Carracao dice que la tiene y ¿ nadie del Gobierno dice nada? ¿Un miembro del ejecutivo puede mandar un mensaje dando a entender revanchas y todo queda en dar una orden para que Carreira se quite el bozal? ¿No habrá ningún cese?

Hacía tiempo que no veía tanto despliegue de Consejeros contra una misma persona, bien para recordarle que no es nadie, bien para animarle a que haga público el mensaje que dice tener, o bien para insistir con el dinero que cobraba del Senado. Dinero trabajado, que nadie lo dude, pero no creo que sea el momento de recordar todas las acciones que han próspero en su etapa política, aunque me voy a quedar con un detalle, la fijación dañina que carga Carreira contra José Antonio Carracao es la misma que promulgó ciertos compañeros del PSOE de Ceuta, que ahora cantan unidad, en unas primarias locales. ¿Curiosidades de la vida o connivencia? También con cierto medio de comunicación.

En definitiva, algo falla cuando los que no están hacen tambalear mucho más que quienes dirigen es estos momentos un partido.

Algo falla cuando quienes dirigen un partido no fiscalizan una nueva chapuza propia de quien lleva tanto tiempo recreándose en el poder y, de paso, sirve para defender a un compañero de una injusticia.

Hay personajes que se esconden tras un caparazón y otros que enseñan las garras hasta detrás del telón.

Como dice mi compañero Luis Mayor “nunca regalaría un libro con unas tapas bonitas y sin contenido dentro. En política las apariencias no lo son todos”. Fíate de las personas desordenadas, pero cuya integridad es más enorme que cualquier reglamento y se rigen por la dignidad, los principios y la lealtad a tu persona, no a lo que representas .