clavó

A un clavo ardiendo

Hasta Draghi es consciente de la miopía fundamentalista y habla de introducir crecimiento

La Romareda vuelve a ser el clavo ardiendo

El presente enfoca al Zaragoza como el máximo favorito para descender, una vez que ha cerrado la peor primera vuelta de su historia desde la temporada 52-53: 12 puntos. ¿A qué aferrarse? La Romareda, donde jugará 10 partidos, es el clavo ardiendo al que agarrarse hacia la salvación.

Ferguson da en el clavo

Ferguson no entiende de inventos, sino de realidades. Como que el Manchester United hace grandes a sus jugadores. Hace tiempo que sus fichajes no le salen rana, que las piezas que ensambla en su equipo funcionan de rechupete por más que se dude desde los tabloides, que el aficionado tuerza de vez en cuando el gesto. Funciona Valencia, de quien parecía que no tenía sitio en la élite; carbura el jubilado Owen cuando tiene minutos; cumplen los hasta hace poco anónimos hermanos Da Silva; fascina Chicharito cuando hace unos meses nadie sabía quién era...y ahora no se duda de que Young y De Gea triunfarán como diablos rojos. Pero tampoco se sisea ni se rumorea en el estadio cuando en el once inicial salen dos jugadores que en el curso anterior estaban a préstamo en equipos menores, el delantero Welbeck (Sunderland) y el medio Cleverley (Wigan). Titulares por delante de Carrick y Berbatov, los dos futbolistas le dieron la razón a Ferguson y resolvieron anoche un duelo sin apenas fútbol, con un Tottenham de buen gusto para la construcción, pero pésimo para la definición, sin ideas ni remate, ausente en el área rival.

«No pararé hasta colgar en un clavo de carnicería al que destruyó mi matrimonio»

Esa frase de Nicolas Sarkozy, citada por sus biógrafos más fieles, ilumina la apertura del proceso Clearstream con su lívida luz de escándalo de Estado. Durante cinco semanas, el Tribunal de París intentará esclarecer una siniestra trama de odio, corrupción, falsificación y tráfico de falsedades manipuladas por parte de los más altos responsables de la diplomacia, la industria de armamentos y el espionaje nacional. Primera víctima, entre otra larga docena de personalidades: Nicolas Sarkozy, ministro de economía cuando ocurrieron los hechos (2004), y actual presidente de la República. Primeros ...
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