Día de Todos los Santos: El abrazo imposible como realidad innegable
Amaneció sombría la mañana ceutí como si la profundidad de la noche arrastrara por siempre la negrura del alma, como si los ancianos, adolescentes o los papás con el hijo tomado de la mano que caminaban por la ladera del Hacho con la mirada perdida rumbo al cementerio de Santa Catalina, hubieran caídos presos de un mal sueño.