El Arsenal recibe al Standard de Lieja con la tranquilidad de haber certificado ya su clasificación para octavos y con el único aliciente ante los belgas de asegurarse el primer puesto. Los pupilos de Arsène Wenger intentarán recuperarse del varapalo sufrido en la Premier este fin de semana después de caer frente al Sunderland, lo que les dejó a ocho puntos de la cabeza, aunque con un partido menos. Los 'gunners tendrán varias bajas de peso, entre ellas las de Van Persie, Bendtner, Fabianski, Diaby, Clichy y Djourou. La buena noticia para los de Londres es la recuperación del lateral Gibbs, ocupante habitual de este carril cuando no puede hacerlo Clichy.
Jovanovic, KO
Por su parte, el Standard viajó con ausencias importantes, lo que complica más sus opciones de dar la sorpresa y mantener vivas sus opciones de pasar a la fase final de Liga de Campeones. A las conocidas de Defour, Dufer y De Camargo se unió la de Jovanovic, lesionado en el muslo. El internacional serbio viajó, pero todo indica que no estará en condiciones de jugar.
En el otro partido del grupo, el AZ Alkmaar está obligado a ganar en su estadio al Olympiacos para mantener sus opciones matemáticas de pasar a los octavos, tras haber sumado sólo dos puntos.
Koeman recupera efectivos
El equipo holandés, último del grupo, está a cuatro puntos de su rival de hoy. El entrenador Ronald Koeman asumió que "un empate no nos sirve para nada y otro resultado diferente a una victoria no sería bueno". El técnico no podrá contar con el defensa Jaliens, que se lesionó en el partido contra el Roda en la última jornada de Liga. Sin embargo, podrá volver a alinear a los delanteros Dembélé, Pellè y Ari, los dos primeros recuperados de sus respectivas lesiones, y el luso tras cumplir la sanción.
Mientras, el Olympiacos viajó a Holanda decidido a vencer para no dar a los 'tulipanes' opciones en la competición. "Ganamos al Alkmaar en casa, por lo que sabemos que también podemos ganarles en Holanda", dijo el español Raúl Bravo a la página digital de la UEFA.Por su parte, el técnico Zico declaró que el segundo puesto es posible pese a las lesiones que afectan a varios de mis jugadores"
El Olympiacos no olvidará su gira por Estados Unidos con un final surrealista y dejando atrás uniformes y otras pertenencias, además de una denuncia por amenazas de muerte debido a una deuda que le reclaman de hace casi una década. Un representante de un ex jugador heleno, Chris Morris, ha acusado a los dirigentes griegos de haberlo amenazado de muerte.
La historia se remonta al 2001 cuando el estadounidense Chris Morris fue cortado por el Olympiacos tras no triunfar y una operación de rodilla que frustró las expectativas que tenían sobre él. El Olympiacos le acusó de falta de profesionalidad y su representante, Tom McLaughlin, agente del jugador reclama dos millón de euros por el despido unilateral. Sus intentos ante la justicia para cobrar topaban con la jurisdicción del tribunal.
Así, la llegada del Olympiacos a suelo estadounidense ha cambiado la situación y McLaughlin y Gary Ebert, otro representante de Morris, trataron de cobrar los dos millones que dicen les adeuda el Olympiacos. Ebert, además, puso una denuncia en Shreveport (Los Angeles) donde declaraba haber recibido amenazas de muerte de alguien que declaró estar asociado al Presidente de Olympiacos y dueño del club, Panagiotis Angelopoulos. Ebert, en declaraciones a Sports Illustrated, asegura que la amenaza se produjo durante una llamada telefónica posterior a una conversación que tuvo con el propio Angelopoloulos el lunes: "Recibí una llamada de teléfono de un número de móvil griego que me decía que dejara en paz a leave Angelopoulos. Yo respondí que lo único que quería era el dinero que se debía a Morris, y mi interlocutor me respondió: 'Déjale en paz, el asunto ya está en los juzgados', a lo que yo le rebatí que estaba en mi derecho de llamarle. Ante eso, me amenazó de muerte: 'Mira, o dejas a Angelopoulos en paz o te mataré'.
