El Ejecutivo de Vivas está preocupado por el elevado número de vehículos que se abandonan en la vía pública. Tanto es así, que está pensando nuevos mecanismos para tratar de luchar contra esta nueva plaga de Ceuta. A corto plazo tratará de agilizar los trámites necesarios para ejecutar la retirada de un vehículo, a medio plazo, para marzo, aprobará una ordenanza que regule sancione estas prácticas con hasta 3.000 euros.

En esa ordenanza que prepara el Gobierno para llevar al Pleno ordinario del mes de enero se regulará no sólo el hecho de dejar un coche abandonado en la vía pública en situación de desguace, sino también las prácticas que puedan molestar en la vía pública, entre ellas, el botellón.

“En el futuro vamos a intentar aprobar una ordenanza que contemple el correcto cuidado de la vía pública y que prevea sanciones. El desguace de vehículos se ha convertido en una especie de negocio y creemos que eso es un mal uso de la vía pública y actividad ilícita por lo que estableceremos un tabla de sanciones”, ha explicado este viernes la portavoz del Ejecutivo, Yolanda Bel.

Esas sanciones pueden ser como máximo de 3.000 euros al tratarse de una ordenanza. “Y el Gobierno tiene intención de llegar al máximo siempre que pueda”, ha apostillado Bel.

En el Pleno de enero esperan llevar a cabo su aprobación inicial, en el de febrero las alegaciones tras la exposición pública y en el de marzo la aprobación definitiva, ha relatado Bel.

A corto plazo, para tratar de erradicar el problema, “algo complejo”, según Bel, el Gobierno lo que va a hacer es agilizar los trámites necesarios entre las distintas partes involucradas de la administración local para retirar los vehículos.

Así implantarán un programa informático que permitirá una comunicación telemática entre Policía Local, Parque Móvil, Amgevicesa y el depósito de vehículos. Con esta herramienta se espera reducir el tiempo que se necesita para retirar un vehículo abandonado en la vía pública al eliminar el papeleo necesario hasta ahora.

El programa permitirá comunicar además de la ubicación del vehículo, su estado y las características de la recogida. Y es que en ocasiones los coches abandonados no tienen ni ruedas, lo que hace más costosa aún su recogida de la vía pública.