La exposición 'Caleidoscopio: arte y terapia', organizada por la Asociación Arga de Grafología, puede parecer una recopilación de dibujos. Pero va más allá. Ha sido una experiencia "maravillosa", de esas que "te tocan el corazón", en la que han participado personas en diferentes tipos de tratamiento que han notado los beneficios de la experiencia.

Y es que el que más y el que menos recuerda la alegría de dibujar y colorear siendo un niño, entonces era casi "un premio". Una paz y entretenimiento que no deberían quedar relegados a las etapas más tempranas, ya que se trata de una actividad terapéutica en la que, a través los ejercicios manuales, ofrece mejoras para el cuerpo y la mente.

Ana Guío, grafóloga y coordinadora de la presentación de la muestra este lunes en la Biblioteca Adolfo Suárez sabe que el dibujo, especialmente el de mandalas, "se utiliza en ambientes clínicos por psiquiatras, centros de días y médicos en pacientes por ejemplo de enfermedades como el Alzheimer". De ahí que desde Arga hayan decidido apostar por esta iniciativa e invitar a participar a siete asociaciones distintas que trabajan con personas que podían aprovechar esta práctica y han ofrecido ochenta trabajos llenos de color y emoción.

"Es bueno para el cuerpo, pero también para la memoria, para la concentración, para todo", enumera la grafóloga sobre los beneficios del dibujo. Además, hay donde escoger, no todo son mandalas ni todos los mandalas son iguales. Las ochenta láminas que componen la exposición, que podrán visitarse hasta el 29 de este mes, explica la diferencia entre caligramas, pinacogramas, karagramas, zendalas o zentangle. Todos ellos representados en las paredes de la sala.

Pero, ¿qué tiene que ver todo esto con la grafología en todo esto? Es precisamente la pregunta con la que Guío -acompañada en la mesa por Susana Isla, Eva Delgado y Ana Muñoz-Manero- ha inaugurado la muestra ante las decenas de asistentes que han llenado la sala de usos múltiples del equipamiento, entre los que ha estado la consejera de Cultura, Pilar Orozco. "Todo lo que hagamos con un lápiz y un papel, sea un dibujo o un garabato, está dentro del campo de la grafología", ha respondido.

Muchos de los presentes han sido a su vez colaboradores de la exposición, miembros de la Asociación Ceutí de Padres y Amigos de los Sordos (Acepas), la Asociaciación Ceutí de Mujers Mastectomizadas (Acmuma), la Asociación de Discapacitados de Enfermedades Neurológica (Aden), la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), la Asociación de Familiares de Personas con Alzheimer (Afa), la Fundación Gallardo y el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso).

El suyo ha sido un trabajo "impresionante" y lleno de "autosuperación" que en muchos casos ha resultado tan satisfactorio para los artistas que no han dejado de producir desde entonces. "Alguno empezó a hacer y hacía más, hacía más... no paró", cuenta divertida y encantada de ver el éxito de las láminas, que han rotado por Cataluña y viajarán a Tarragona próximamente.