¿La última subida al rocódromo?

¿La última subida al rocódromo?
La Federación cuenta con 200 federados

- La Federación de Montaña y Escalada de Ceuta celebró el jueves el campeonato juvenil de escalada ante “la incertidumbre” de saber qué va a pasar con el rocódromo

- El Ministerio de Educación lo quiere fuera del nuevo centro de Primaria, donde permanece ubicado, la Ciudad ya ha rechazado tres de las ubicaciones propuestas por la Federació: El Parque de San Amaro, la plaza junto a la nueva Biblioteca y el IES Clara Campaomor


 

La Federación de Montaña y Escalada de Ceuta celebró este jueves el Campeonato Juvenil de Escalada en el rocódromo ubicado en la antigua casa de la Juventud, donde sigue, pero de donde debe desmontarse para trasladarse a una nueva ubicación que aún no existe. Ante la situación, el presidente de la federación, Francisco Escobar, sintetiza todo en una palabra: “incertidumbre”.

El Ministerio de Educación ha expresado su voluntad de que el rocódromo abandone su actual ubicación en lo que era el patio de la Biblioteca Pública de Ceuta y la Casa de la Juventud, pero que hoy es el de una Escuela de Educación Infantil y Primaria.

La instalación que costó unos 50.000 euros en su día es propiedad de la Ciudad Autónoma, si bien, la gestión y el mantenimiento de la misma corresponde a la Federación de Montaña y Escalada de Ceuta, que se hace cargo de la misma mediante un convenio con la propia Ciudad Autónoma, gracias al cuál mantienen en buen estado la instalación y ofrecen cursos en una escuela que tiene lista de espera. La Federación cuenta hoy con 200 federados, según ha explicado Escobar.

“Esto es propiedad de la Ciudad. Y la Ciudad puede hacer con ello lo que quiera. Es el mismo caso que si mañana decidiera cerrar el Campoamor, por lo que fuera. Si lo quiere meter en un almacén puede. Pero sería una pena perder una instalación deportiva que además usa mucha gente para practicar un deporte”, ha explicado Escobar.

Por sí mismo, que Escobar dé esta explicación refleja las muchas dudas que han surgido en la federación en el proceso de salida del rocódromo de su actual ubicación. Y es que la Ciudad ha rechazado hasta ahora todas las ubicaciones propuestas desde la federación: en la pequeña plaza redonda en los jardines contiguos a la nueva Biblioteca Pública del Estado, en el IES Clara Campoamor y en el Parque de San Amaro.

La primera idea que tuvo el gobierno fue la de ubicar el rocódromo en el parque de Santa Catalina, junto al cementerio. Desde la Federación se le avisó entonces al Gobierno que desde el punto de vista técnico era desaconsejable, por los vientos que azotan la zona, que más allá de dificultar la práctica del deporte, podrían incluso llegar a tumbar la estructura. Eso y el salitre.

“Esto es de fibra de vidrio por fuera y de metal por dentro. La empresa que viene todos los años a realizarnos el mantenimiento, nos dice siempre que se nota que está cerca el mar. Y es aquí, no queremos imaginar cómo se deterioraría la estructura en un sitio al lado del mar”, ha explicado Escobar.

Aún así, la Ciudad no se rindió y le propuso a la Federación ubicarlo en la zona de Fuente Caballo, mismo problema de deterioro y azote de vientos que en Santa Catalina.

Ubicaciones propuestas

La situación está en punto muerto. Se busca espacio de unos 100 metros cuadrados, 10 por 10, para anclar la estructura y permitir que la práctica de la escalada en Ceuta siga adelante.

La Federación propuso en un primer momento el Parque de San Amaro. Consideraban que contribuiría a dinamizar la vida del propio parque, que se podía ubicar en la zona alta del mismo, a resguardo de los vientos. El Gobierno lo desechó por entender que rompería la visual del entorno.

Así surgió la opción de ubicarlo en la plaza contigua a la nueva Biblioteca, que contaba con la ventaja añadida de contar cerca con un polideportivo que puede ofrecer vestuarios a los deportistas. Pero este mismo jueves se recibió también la negativa por parte del Ejecutivo.

Antes de eso se pensó también en el propio Instituto Clara Campoamor, que cuenta además con un módulo de Formación Profesional de Actividades Deportivas y ya cuenta con un rocódromo interior en la pared del gimnasio, pero el Ministerio señaló que la instalación se comería más de medio parking del centro causando malestar entre los docentes.

“Así que no sabemos qué va a pasar”, ha lanzado Escobar. Se busca hueco para ubicar el rocódromo. Los escaladores no acaban de entender el no a la ubicación junto a la Biblioteca, que no ha sido motivado. Y ya temen que finalmente la instalación acabe en un almacén criando polvo.

Además su desmontaje y montaje no es una cosa sencilla, y la Federación tiene previsto que sea la propia empresa que realiza el mantenimiento la que se encargue de su traslado a la ubicación que se decida finalmente. “Esto es como un puzzle”, señala Escobar. Y por dentro las piezas externas están nombradas de forma alfanumérica para facilitar su encaje.

 

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