Ceuta cuenta con más de 10.000 trabajadores públicos. De esos, tan sólo unos 500 han secundado el llamamiento de los sindicatos CCOO, UGT y CSIF para concentrarse ante la Delegación del Gobierno para protestar por el recorte salarial a los empleados públicos.

Antes de conocer de forma oficial la medida del Gobierno, los trabajadores mostraban su desacuerdo con una medida de ajuste y control que según los sindicatos es injusta. Incluso más, algunos como el secretario general de la Federación de Servicios Públicos de UGT, Juan Carlos Pérez, aseguraban que se trata de una decisión ilegal que los sindicatos llevarán a los tribunales.

Tampoco han gustado las formas. Las centrales sindicales no han recibido información previa al Consejo de Ministros sobre el recorte, y se les ha invitado a escuchar el anuncio "por la radio". Algo que no ha gustado nada a los representantes de los trabajadores que ya preparán la siguiente medida de presión, la huelga del sector público del 8 de junio. Si todo sigue igual, y finalmente el Gobierno incluso aprueba la esperada reforma laboral, no se descarta incluso una huelga general en el país.