El alumnado de Ceuta tiene más en común con el de países del otro lado del charco, como México, Puerto Rico o Colombia, que con el de algunas Comunidades Autónomas de España. Los datos del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) no han sido halagüeños para los estudiantes caballas, que de nuevo se sitúan a la cola del país en sus resultados en matemáticas, lectura y ciencias.

El acoso escolar se presenta como otro de los problemas endémicos de la educación en la ciudad autónoma, cuya tasa de acoso del 10,7% supone “un porcentaje muy superior al promedio de España”, con un 6,5%.

La localidad presenta además “una fuerte diferencia (-0,35) en el acoso percibido por el alumnado socioeconómicamente desfavorecido y favorecido, siendo el primer grupo el que mayor acoso reporta”.

Por partes, en el área de competencias matemáticas, los ceutíes han dejado patente su ansiedad frente a los problemas de esta índole, especialmente entre la población inmigrante, por lo que los índices de confianza en su competencia y preparación es uno de los más bajos del país.

Por ponerlo en perspectiva, Ceuta ha obtenido 395 puntos en este epígrafe, cifra similar a la de México, Costa Rica y Colombia y solo similar a Melilla en el territorio patrio, que cuenta con un promedio nacional de 437 puntos, más alineado con Alemania o Francia.

Tampoco mejoran los resultados en lectura (404 puntos), donde los estudiantes de la ciudad han mostrado sus dificultades a la hora de desarrollar su comprensión lectora, donde de nuevo empatan con los colombianos, pero también con los alumnos de Bulgaria o Chipre.

Según PISA, el 52% de los caballas no alcanzan el nivel mínimo de competencia lectora para jóvenes de 16 años.

Este último país también aparece en la comparativa del área de Ciencias (410 puntos), en la que la ciudad autónoma vuelve a desmarcarse de las cifras nacionales para equipararse a Costa Rica, México y Chipre con casi el 49% de alumnos encasillados entre los de “bajo rendimiento” en esta materia.

Y si bien las diferencias no son significativas entre mujeres y varones, la brecha se abre de par en par cuando se analiza la titularidad de los centros.

La diferencia de motivación entre Ceuta y Melilla

Pese a sus similitudes con Ceuta, la ciudad autónoma de Melilla (0,05) es sin embargo la única entre las comunidades y ciudades autónomas que presenta un valor positivo en el índice de "mentalidad de crecimiento". Un indicador que mide el esfuerzo de los menores por alcanzar su máximo potencial o, por el contrario, su tendencia a permanecer en su zona de confort.

El propio informe admite que “es llamativo que en el sentido opuesto se encuentre la ciudad autónoma de Ceuta (-0,30) como la que menor valor de índice es reportado por el alumnado en España”. Un indicador en el que, en todo caso, no existe diferencia entre chicos y chicas.

No son buenas noticias, y tanto el Ministerio de Educación y el resto de agentes sociales deberán tomar nota, ya que queda patente que algo falla en el sistema educativo local. La única lectura positiva es que todavía queda margen de mejora.