Optimismo. Ese es el mensaje que transmiten los cargos de la Universidad de Granada respecto a la posibilidad de lograr la implantación de los nuevos máster en el Campus de Ceuta que la Junta de Andalucía había frenado la pasada semana. El principal escollo era la ausencia de garantía económica por parte de la Ciudad de cara a su puesta en marcha. Ahora, las fuentes consultadas entienden que la postura ha cambiado y que ese apoyo podría cerrarse de cara a presentar alegaciones esta semana.

"Las tendremos listas el lunes (por hoy)", apuntaban desde el interior de la institución educativa a finales de la pasada semana. La idea era que precisamente este lunes pueda llegarse a un acuerdo con el Gobierno local para pegar un empujón a la candidatura, vía inyección económica.

La propia Administración local aseguraba días atrás a este medio que iban a colaborar "en todo lo preciso" y revelaba haber retomado contactos con el Estado y la Junta andaluza de cara a salvar el escollo que ponía en riesgo las nuevas titulaciones de Educación Digital y Gestión de Salud Pública.

El culebrón

La pasada semana ceutaldia.com consultó con fuentes con altos cargos dentro de la Universidad sobre los motivos que llevaron a Andalucía a tumbar la solicitud. Estas señalaron que la decisión "no es definitiva" y que se presentarán alegaciones.

También que hay diversos motivos, pero el que más pesa es precisamente la cuestión económica. "Los campus de Ceuta y Melilla están infrafinanciados por parte del Estado y ese déficit lo está cubriendo la Junta de Andalucía". Harta de esta situación, sacó un decreto por el que todas las nuevas titulaciones que se solicitaran para este periodo 2024-2028 debían tener "asegurada la financiación".

Claro, las que se impartan en Granada sí las pagará la comunidad, no así las de Ceuta, hacia donde "están mirando con lupa".

Esta fuente ponía en contraposición el caso de Melilla, donde se ha dado de paso un grado -pidieron dos- y dos másteres -solicitaron tres-, sin que ninguna nueva titulación se haya frenado por la cuestión económica, sino por otros aspectos que se consideran subsanables. "El Gobierno de (Juan José) Imbroda siempre ha dejado claro que se compromete al pago integro de todos los incrementos. Cualquier propuesta que venga de allí, la Junta sabe que está respaldada. Eso ayuda mucho".

De hecho, aseguraban las personas consultadas que, aunque la cuestión del alojamiento también tiene peso, lo que más decantó la balanza hacia no solicitar nuevos grados fue la inseguridad sobre su financiación.

Reacción y confianza en las alegaciones

Los responsables del Campus Universitario de la UGR en Ceuta decidieron desde el primer momento alegar, intentando que la Junta de Andalucía reconsiderara su postura. Eso sí, reconocían los consultados que "sería de gran ayuda que la Ciudad se planteara garantizar la financiación".

Con esa opción, aún por cerrar, pero apareciendo como viable, desde el pasado viernes, altos cargos de la UGR se mostraban optimistas. "Las presentamos porque creemos que se puede hacer y también queda pendiente una reunión con la Ciudad en la que esperamos se pueda cerrar ese apoyo".

El Estado no arrima el hombro

Lo cierto es que los sucesivos gobiernos de España, de los dos partidos hegemónicos (PSOE y PP) no han ayudado mucho a potenciar la universidad en Ceuta y Melilla, más bien al contrario. Todos los consultados afean la gestión desde Madrid, que ha mantenido "infrafinanciados" ambos campus, obligando tanto a Andalucía como a las dos ciudades a un notable esfuerzo económico. Es su gestión la que inicia las complicaciones.

Cabe destacar que la Ciudad destinó 27 millones de euros para la construcción y puesta en marcha de la sede universitaria y que el Gobierno central únicamente transfirió nueve de los veinte millones que puso la UGR para ambas localidades enclavadas en el norte de África.

Se espera que esta tendencia pueda cambiar en los próximos meses, al menos así lo señalan altos cargos de la institución nazarí, que ven al actual Ejecutivo con una "mayor sensibilidad y voluntad" a incrementar la financiación, a la vista de las últimas reuniones mantenidas con sus interlocutores en Madrid.