El sindicato no acepta que un recinto "limitado y perfectamente custodiable esté al merced de la inseguridad ciudadana, sin la más mínima protección, por culpa de un incompetente que aparte de insultar a los sindicatos poco más ha hecho en esta ciudad".
Comisiones Obreras denuncia que este problema no afecta tan sólo a los trabajadores del puerto, sino a toda la ciudad, porque la zona por la que se mueven los inmigrante hay una concentración elevada de material inflamable y factores de riesgo evidentes.
Aróstegui ha acusado de mentir a García Arreciado, que dijo hace unas semanas que el problema de las escolleras había acabado. El secretario general de CCOO mantiene que el delegado "desde que ha llegado a esta ciudad, además de insultar no ha dicho una sola verdad. El problema está permanente y latente. Los trabajadores pueden dar prueba de ello, o cualquier ciudadano que quiera pasear por aquí se da cuenta de que las cosas están igual o peor".
La solución que ofrece Comisiones es la de establecer un retén permanente de la Guardia Civil vigilando el puerto, ya que las batidas aleatorias no tienen demasiado efecto. Aróstegui ha asegurado que según los calculos del sindicato, dicha medida sólo necesitaría de doce efectivos de la Guardia Civil destinados a este propósito. Una propuesta que la Administración ha rechazado por falta de personal, lo que ha provocado las críticas de Aróstegui que ha indicado que "sí los tiene para otras cosas, como custodiarse a ellos mismos, vigilar a los sindicatos o a las personas que trabajan en la vida pública".
El sindicato Comisiones Obreras considera que hay una buena ley de riesgos pero que "nadie la aplica". Según Aróstegui, los empresarios son "reacios" a cumplir la ley, y la Administración "no hace todo lo que debiera" para asegurar su cumplimiento. Una situación especialmente preocupante en los sectores de la construcción y el transporte. El líder de CCOO cree que el trabajo sindical está dando sus frutos, y que los empresarios poco a poco se están concienciando de que la seguridad y la salud de los trabajadores "es un derecho que tienen la obligación de proteger y preservar".