Adiós a la gran carismática


Adiós a la gran carismática
Se había quitado la gomina y soltado la melena de leona. El autobús la llevaba desde la piscina, en una isla del río San Lorenzo, al centro de Montreal. Iba cruzando el puente mientras respondía a las preguntas de un curioso que quería aprender sobre la competencia en el máximo nivel de la natación. El pardillo le preguntó si comer donuts era un lastre insoportable para un nadador. Ella, que acababa de cerrar los Mundiales de 2005 con una cosecha de cuatro medallas y estaba a punto de irse de vacaciones a Nueva York, hizo un ademán aristocrático y, un poco cansada de tanta cháchara, respondió:



Posted originally: 2012-02-14 21:28:00

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Adiós a la gran carismática


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