Dentro de unos días sus fotos aparecerán probablemente colgadas en algunas webs radicales islamistas. La mujer estará cubierta como lo exigen los rigoristas. Quizá las instantáneas habrán sido tomadas en el norte de Malí, país vecino de Mauritania. Llevarán la firma de Al Andalous, el nombre con el que los terroristas han bautizado su productora.