Los Lakers, como suele ser habitual, sufrieron para ganar en la cancha de Utah. Lo consiguieron tras una prórroga y gracias a que Kobe Bryant, un día después de haber anotado 48 puntos ante Phoenix, volviera a ofrecer otro recital ofensivo y les endosara 40 puntos a los Jazz. Fue la octava victoria del equipo de Los Ángeles, segundo en la Conferencia Oeste, tras Oklahoma.