Hace cinco años visitábamos a Ana María Matute. Estaba a punto de cumplir los 80 y andaba enfrascada en su novela «Paraíso clausurado», cuya versión alemana se presenta dentro de poco en Hamburgo: «No sé si podré ir porque no hay vuelo directo y eso, a mi edad, es un fastidio», nos comenta. En la sala de estar, montones de libros pendientes de ubicación, y en la mesa de centro una bonita edición del «Viaje en autobús» de Josep Pla.
A la señora Matute la empezamos a leer en los años de Bachillerato junto con «El Jarama» de Sánchez Ferlosio. Era de la generación del 55, el último capítulo del ...