Hace tiempos hablado del libro de Pasquino sobre la oposición política. Indicaba que, si bien llevaba un título genérico, realmente era un escrito de ocasión a propósito de la primera victoria electoral de Berlusconi y de la historia política italiana en la llamada ‘I República’.

Le he dado vueltas a los diferentes tipos de oposición que se dan en España, porque no toda la oposición es homogénea e incluso la mayoría no se siente oposición. Tampoco tendría sentido contemplar la oposición en un único ámbito político (el nacional), ya que tanto el nacional, como el autonómico, como el municipal se encuentran enlazados a la hora de definir qué es la oposición y cuáles son las diferentes formas de hacer oposición.

Una definición provisional de oposición (parlamentaria) que necesariamente tiene que ser negativo. Por tanto, un partido es forma parte de la oposición cuando no gobierna o no es parte de un pacto de estable de gobierno, aunque no participe en éste.

Este segundo requisito puede ser considerado de un modo estricto, requiriéndose por tanto un acuerdo para sacar adelante un programa global de gobierno en las diversas áreas en las que se tenga competencia, o puede ser también considerado de un modo laxo al decir si, sin tener un acuerdo de apoyo global, sí sostiene al gobierno en cuestiones fundamentales que le podrían hacer caer. Si valoramos el modo laxo entonces tendremos dos posibilidades: oposición y semi-oposición.

Definido el conjunto hay que indicar que todos los que satisfacen estos requisitos (no estar en el gobierno y no ser parte de un pacto estable de gobierno) pasaremos a una serie de cualidades de pueden aportarnos mayor claridad sobre ante qué tipo de oposición nos encontramos.

El primer grupo de variables describen la posibilidad de acceder al gobierno en los diferentes ámbitos. De esta forma tendremos oposiciones que son temporales (porque tarde o temprano entrarán en el gobierno), oposiciones que tienen muy pocas posibilidades que solamente pueden entrar en un gobierno como socio minoritario y oposiciones que tienen certeza que no tienen ninguna posibilidad real de entrar en un gobierno.

El segundo grupo de variables está en función del anterior y describe las posibilidades de acceder al gobierno en cada una de las esferas políticas. Todos conocemos que hay partidos que ni siquiera aspiran al gobierno en la esfera nacional pero sí lo hacen, y con buenos motivos, en la esferas regional y en la municipal. Como las posibilidades pueden varias entre regiones y, aún más, entre municipios, el mapa de oposición cambiaría en cada una de las esferas concretas. La variabilidad será menor si solamente comparamos los ámbitos regionales con el nacional, ya que después de treinta años de democracia el arco de posibilidades se ha estabilizado mucho.

Posted originally: 2010-10-11 10:00:22