- martes 07 mayo 2024
El ex vicepresidente de Estados Unidos Dick Cheney opina que la decisión de la Administración de Barack Obama de permitir que se investiguen los presuntos abusos de la CIA contra detenidos por terrorismo hace poner en duda la capacidad del nuevo Gobierno de velar por la seguridad del país.
En un comunicado enviado al semanario ‘The Weekly Standard’ que éste publica en su página web, el ex vicepresidente considera que esta medida tomada por Obama así como el traspaso a la Casa Blanca del control de los interrogatorios “sirve como recordatorio, si es que se necesitaba, de por qué tantos americanos tienen dudas sobre la capacidad de su Administración de ser responsable de la seguridad de la nación”.
Con motivo de la desclasificación de documentos de la CIA en los últimos meses que demuestran los abusos y malos tratos ejercidos contra sospechosos de terrorismo en los interrogatorios, además de la decisión del Departamento de Justicia de investigarlos, Cheney vuelve a manifestar su apoyo a estas técnicas aprobadas por la anterior Administración de George W. Bush y que han sido calificadas como tortura por el propio Obama. “Los documentos revelados ayer demuestran claramente que los individuos sujetos a las Técnicas Intensivas de Interrogatorio (Enhanced Interrogation Techniques) facilitaron un volumen de (información de) inteligencia sobre Al Qaeda”, explica.
Según Cheney, esta información “salvó vidas y evitó ataques terroristas”, al tiempo que los detenidos, añade, “jugaron un papel en casi todas las detenciones de miembros de Al Qaeda y sus socios a partir de 2002”.
Por ello, el ex vicepresidente justifica las acciones de la CIA desde que Estados Unidos lanzó su denominada guerra contra el terrorismo porque fueron “directamente responsables” a la hora de “frustrar todos los esfuerzos de Al Qaeda por lanzar ataques masivos” contra este país. Por lo tanto, una vez más, el ex vicepresidente afirma que los agentes implicados en los abusos y malos tratos “no se merecen ser los objetivos de investigaciones políticas o acusaciones”.
Liz Cheney, la hija mayor del ex vicepresidente de EEUU Dick Cheney y que ha emergido como una crítica enérgica de la política exterior del presidente estadounidense, Barack Obama, indicó hoy que está considerando seriamente hacer una carrera política.
"Es algo que podría hacer", dijo Liz Cheney, de 42 años de edad, en una entrevista con el programa de radio "America's Morning News", del diario conservador "The Washington Times".
Cheney trabajó en la campaña presidencial del senador republicano John McCain en 2008 y en meses recientes ha salido en defensa de los métodos de interrogación de supuestos terroristas, avalados por su padre durante el gobierno del presidente George W. Bush.
Grupos de derechos humanos, abogados de detenidos y legisladores demócratas han calificado esos métodos como tortura. El ex vicepresidente ha señalado que su gobierno cumplió con su mandato de proteger a los estadounidenses de ataques terroristas.
Liz Cheney ha criticado en entrevistas, y en un artículo de opinión que publicó el lunes el diario "The Wall Street Journal", la política exterior de Obama que, según ella, reduce la estatura de EEUU ante el mundo y alienta a los enemigos del país.
Cheney opinó que la deferencia que Obama muestra hacia los puntos de vista de otras naciones equivalen a "un desarme de Estados Unidos".