La Ertzaintza impidió este sábado en San Sebastián dos manifestaciones a favor de los presos de ETA, una convocada por el Movimiento pro Amnistía y otra que surgió de una manera más espontánea al ser disuelta la primera. El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco había prohibido la marcha, pero pese a ello los alrededor de 300 personas se concentraron alrededor de las siete de la tarde frente al Kursaal con fotografías de los presos y 10 minutos después se adentraron por el barrio de Gros, adyacente al palacio de congresos.