El auditorio de la Marina fue este sábado el altavoz sonoro, ruidoso, rockero y ambiental de Ceuta. Cientos de ceutíes se pasaron por el festival Caballa Rock, que coge vuelo y se consolida en el panorama cultural de la ciudad, para disfrutar de unas cuantas horas de buena música en directo que remató el mítico grupo Nacha Pop entonando la que es una de las canciones más icónicas de las últimas décadas de la música patria, La Chica de Ayer.
Antes durante toda la tarde reinó el buen ambiente, un enorme toldo colocado cubriendo el centro del recinto acabó con los problemas de calor de la edición anterior en las primeras horas del evento. Al empezar a caer la tarde se respiraba buen ambiente y buena música, local, con sello ceutí, más que nunca. La gente se divertía y mucho y sobre el patio se juntaban los que no salen nunca, los que salían pero ya no salen y los que salen siempre. Alguno juraba haber visto al mismísimo Blanco Herrera.
Tras dos años con la vida en general en pause por la pandemia había ganas de esto, de música en directo, de un grupo tras otro, y de ese ambiente que sólo se da en este festival.
