El comité de empresa de Trace (UGT, CSIF, UNT) sigue la máxima de que si algo funciona no hay motivo para cambiarlo. Por ello, los sindicatos integrantes han manifestado su “rotundo” no a la municipalización del servicio municipal de limpieza y amenazado con “tomar medidas más fuertes”. “Si hace falta hacer una huelga general se hará”, han amenazado.

Para las sindicales, que copan 11 de los 17 delegados en la empresa, “a fecha de hoy y desde hace muchos años atrás” el servicio “ha ido bien en la privada”, por lo que no ven la necesidad de cambiar la titularidad del mismo.

El lunes por la tarde han adelantado que tendrán una reunión con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, al que trasladarán su “no a la municipalización” e intención de “tomar medidas más fuertes” en caso de no ser escuchados. Una situación que los miembros del comité han equiparado a la de Brigadas Verdes “cuando el traspaso a Tragsa”.

“Aún no estamos dirigidos por la ciudad y ya ha empezado a incumplir nuestro convenio, convenio que con mucho sacrificio hemos logrado después de muchas peleas en muchos años”, han lamentado.

“No lo vamos a permitir y vamos a llegar hasta donde tengamos que hacerlo. No vamos a permitir que jueguen con el pan de nuestros hijos, que jueguen con nuestros derechos que tantos y tantos años hemos luchado para tenerlos, los cuales ahora en esta maniobra oscura que quieren hacer se ven claramente perjudicados, lo mires por donde lo mires”, han denunciado sobre lo que califican de “capricho” político y de “un sindicato que está en minoría (CCOO) y lleno de rencor”.