Si hay una película que encaja con la definición castellana de rocambolesco, esa es La Malcasada. Un film en el que un torero acude a pedir consejo a Franco, Millan Astray o Valle-Inclán -entre otros muchos personajes conocidos de la época- sobre su divorcio, tras conocer durante los 81 días de su matrimonio que su mujer le es infiel. Una joya que solo se proyectó una vez sin censura en España y que este jueves, a las 19.30 horas, llega a la Biblioteca de Ceuta.

La película fue rodada en 1926 por Francisco Gómez Hidalgo y retrata la relación entre un torero mexicano y una actriz a la que conoce en un barco viniendo de Lima, con la que se casa precipitadamente y cuyo matrimonio apenas dura 81 días, al enterarse este de que le pone los cuernos.

"Lo llamativo del film es que cuenta una historia real de la época. El matador es Rodolfo Gaona y la intérprete, Carmen Ruíz de Moraga, que era amante de Alfonso XIII, algo que no sabía su marido en el momento de la boda", explica el director de la Biblioteca Pública Adolfo Suárez, José Antonio Alarcón, que se encargará de la ponencia el jueves.

La relación acaba en divorcio ante el Tribunal de Rota, dado que de aquella no era legal el proceso actual, pero lo interesante de la película, tal y como plantea el conferenciante, está en los cameos.

Gaona, llamado Félix Celaya en el film, "se recorre las casas de un centenar de personajes relevantes de la sociedad española de la época". Incluso aparece pidiéndoles consejo sobre un eventual divorcio al general Francisco Franco -que a la postre instauraría una larga dictadura en España-, al militar fascista Millan Astray, al que fuera presidente del Consejo de Ministros, Alejandro Lerroux y a figuras de la literatura como Valle-Inclán, Pedro Muñoz Seca o Manuel Machado, científicos como Concha Espina, al tenor Miguel Fleta o al Conde de Romanones, entre otros muchos otros.

Un desfile de caras conocidas durante dos horas y media, incluyendo a Primo de Rivera, que mandaba en España tras su golpe de estado, y a Alfonso XIII, bastante implicado en la trama: "A él no le parecería mal, el que tenía los cuernos era Gaona", bromea al respecto Alarcón.

Lo que no hizo tanta gracia al gobierno de la época fue la presencia de dos opositores entre las muchas apariciones de caras conocidas. "Salen Valeriano Weyler y José Sánchez Guerra. Uno ya le había intentado dar un golpe de estado a Primo de Rivera y el otro lo haría años después. Cuando se exhibe por primera vez la película en el Teatro Centro (ahora Calderón) de Madrid, hay una gran ovación a las escenas de ambos. Allí está el vicepresidente y manda detener la proyección", cuenta el director de la Biblioteca.

Director, productores y Gobierno llegarían al acuerdo de censurar sus apariciones, para que esta pudiera volver a pasarse ante el público, en Barcelona y Madrid. Curiosamente, fue en Nueva York, primero y en general en América, donde cosecharía un mayor éxito, en su versión sin cortar: "La vendieron allí como la película prohibida en España y todavía consiguieron sacar algo de dinero".

El público ceutí, tendrá la posibilidad de disfrutar de los treinta minutos de cameos que incluye la primera versión del film, además de una explicación previa por parte de Alarcón, el próximo jueves a las 19.30 horas.