Este 4 de diciembre se celebra la festividad de Santa Bárbara patrona del arma de artillería desde hace casi medio milenio. En 2022 se cumplen 500 años desde que Juan de Terramonda declarara patrona a la santa cristiana en la plaza de Burgos en la ya famosa efeméride ‘Recibo de la Pólvora’. 

Festividad que este sábado se ha celebrado un año más en el acuartelamiento Fuentes Pila de Ramix 30 y en el que, además, se ha despedido a quienes pasan ala reserva. Pero, advierten, “nada termina pese a despedirse del estandarte”, el juramento sigue vivo. “Ser militar intemporal realmente este acto tan solo viene a materializar el agradecimiento de todo lo que representa nuestro estandarte a quien ha entregado los mejores años de su vida al servicio a España”.

El Regimiento RAMIX 30 es uno de los más antiguos del país, nacido 80 años antes de la Revolución Francesa, “forjando una historia de sacrificio y heroísmo que ha ido incorporando múltiples enseñanzas extraídas de los distintos conflictos y operaciones que han acaecido en estos 311 años”. Más de 300 años, en los que han pasado de disparar bolardos con cañones de bronce y hierro a los proyectiles dirigidos por GPS pero,  puntualizan, “siempre bajo el lema Ultima ratio regís que nos caracteriza”. “un lema que viene a sintetizar la decisiva capacidad de la artillería para conseguir la victoria una vez agotadas el resto de las opciones.”

Pero la pandemia lo ha cambiado todo y el RAMIX ha aparcado la artillería para ponerse en la primera línea de combate contra la Covid-19 en las operaciones Balmis y Baluarte en tareas de patrullaje, apoyo a las autoridades sanitarias y detección de casos; sin olvidar, subrayan, su apoyo logístico  en la crisis migratoria de mayo.