Pes a todo, el presidente considera que es todavía precipitado hablar sobre la desaparición de más apéndices de la Ciudad, y que cada caso se estudiará de forma particular.
Vivas ha querido tranquilizar a los trabajadores del ICD, asegurando que con el cambio ganaría en estabilidad laboral, ya que de esa forma pasarían a ser directamente trabajadores del Ayuntamiento.