El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha dado un paso más para alejarse de la política de su predecesor en la Casa Blanca y ha anunciado que abandonará el proyecto de construir en Europa un escudo antimisiles para contener la amenaza de países como Irán o Corea del Norte. Obama ha anunciado que habrá una nueva estrategia basada en el desarrollo de otra tecnología, probada y efectiva, que será mucho mejor para afrontar posibles amenazas de Teherán.