El empresario José María Solís, propietario de la constructora Cavas, ha mantenido en vilo durante cuatro horas al Ayuntamiento de Loeches. Con dos bidones de gasolina, una botella con una mecha y atrincherado en su camión, estaba aparcado a las puertas del consistorio de la localidad madrileña y amenazaba con prenderse fuego si el consistorio no le pagaba los 450.000 euros que le debe hace cuatro años. El empresario, que asegura que la deuda le ha llevado a la quiebra, ha iniciado su protesta a las ocho de la mañana y se ha marchado en torno al mediodía. "Ya se ha solucionado todo y el hombre ya se ha ido con el camión", ha indicado un agente de la Policía Local a esta web. El agente desconocía cómo han logrado que el constructor depusiera su actitud. ELPAÍS.com ha tratado de ponerse en contacto con el gobierno local sin éxito.
Posted originally: 2009-02-02 12:16:00