La Guardia Civil se ha hecho con un ingente cargamento de hachís de nada menos que 413 kilogramos. La incautación tuvo lugar en la tarde de este pasado lunes, día 24. Sobre las 17:30 horas, un contenedor levantó las sospechas de varios agentes de la Unidad Fiscal y de Fronteras desplegados en la zona portuaria.

Durante la fase de inspección previa a la subida de la carga a bordo de un buque mercante con destino a Algeciras, los efectivos del Cuerpo observaron indicios de manipulación en varias bombonas de oxígeno industrial que formaban parte del grupaje que estaba siendo examinado.

Dada la coyuntura, el instituto armado hubo de recurrir al olfato de uno de sus perros antidroga. Tras la insistencia del mismo, los funcionarios consideraron oportuno proceder a la apertura de una de las botellas. En el interior de la misma, estos hallaron, para su sorpresa, alrededor de 27 kilos de estupefaciente.

Las labores de inspección se reanudaron durante la jornada del martes, 25 de octubre, siendo examinadas 14 bombonas adicionales, lo que, en suma, resultó en la carga de 413 kilogramos anteriormente aludida.

El Cuerpo ha dado inicio a una amplia investigación al objeto de localizar y detener a los autores del hecho. Por lo pronto, antes de que eso suceda, la mercancía incautada ha sido depositada en el Área de Sanidad de la Delegación del Gobierno.