Opinión
La igualdad es rentabilidad económica, así que cuando hablamos de ella, lo hacemos bajo la absoluta certeza de haber sabido adaptarnos a una realidad presente en un contexto de crisis. El Gobierno Central, confía en las políticas de igualdad como parte de la solución y como una inversión a largo plazo, ya que su rentabilidad se manifiesta en términos de unas tasas de empleo femenino más elevadas, a la contribución de las mujeres al PIB, y a la mejora de los ingresos fiscales. Actualmente, el empleo femenino en los sectores de la nueva economía sostenible, representa el 46,6% del total, y en los próximos 15 años este porcentaje alcanzará el 60% si hay una apuesta decidida por parte de los agentes económicos, tanto públicos como privados, por un nuevo modelo productivo. El PSOE sabe que tiene que ser así porque si se mantiene el modelo tradicional se dejarán de crear 1,9 millones de puestos de trabajo femeninos, algo que afectaría notablemente a la economía del País.