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"No pudimos asumir un reto tan grande"

Cuatro de los cinco hijos de Phil Jackson volaron hasta Dallas para presenciar el que acabó siendo el último partido en la carrera profesional de su padre. Se situaron tras el banquillo de los Lakers y vistieron camisetas y gorras amarillas con los números romanos X y XI en memoria de los dos últimos anillos logrados por Phil Jackson. Cuando todo concluyó, cuando los Mavericks redondearon la gran paliza que propinaron a los Lakers, 122-86, Phil atravesó la pista, fue saludado por Rick Carlisle, el entrenador que le ganó la última partida, por Jason Kidd, el veterano base que llevó de cabeza a su equipo, y finalmente por Mark Cuban, el dueño del equipo de Dallas, que pareció recriminarle algo. Sereno, pausado, como casi siempre, Phil Jackson, explicó que el decidido intento de ganar el tercer anillo para los Lakers acabó pasando factura. "Nos pusimos mucha presión desde todos los ángulos: personalmente, espiritualmente, físicamente, emocionalmente. Fue un reto más grande de lo que fuimos capaces de asumir".

"Pudimos ganar y no supimos hacerlo"

Real Sociedad

Martín Lasarte compareció ante los medios de comunicación con la sensación de que la Real había dejado escapar una oportunidad de oro de haber sumado un nuevo triunfo. "La sensación es, con todo el respeto hacia el rival, de que dejamos pasar la oportunida de sumar tres puntos. No es malo sumar fuera, pero creo que al final el equipo cogió intensidad y se lo creyó muy tarde y no nos dio tiempo", se lamentó. "Dejamos pasar la oportunidad de ganar y lo considero no bueno", significó.

A pesar de todo, Lasarte quiso extraer conclusiones positivas. "Si uno mira para atrás, hoy conseguimos empatar ante un equipo que venía de ganar y no lo veo mal. La idea es intentar sacar algo fuera y ganar en casa", puntualiza, aunque advierte que "no siempre vas a ganar en casa y hay que intentar ganar fuera". "Me voy triste porque la lectura que me da el partido es de que pudimos ganar y no lo supimos hacer", matizó.

Después de una primera mitad "bastante mala", Lasarte reconoció que el equipo mejoró sus prestaciones en los segundos 45 minutos. "Los cambios han mandado el mensaje de reacción tardía. En esa segunda mitad me dio la sensación de que nosotros cogíamos terreno, confianza y valentía y la idea era dar refresco, otras ideas, otra movilidad, variando la idea inicial de posesión de balón. Lo que se pretendía no salió bien y lo que se intentó al final tampoco, pero dio la sensación de que era mejor para este partido. Dejamos pasar una oportunidad", afirmó.

La intención inicial de Lasarte no dio sus frutos. "Queríamos un equipo de posesión, con herramientas de pase y calidad, pero ese equipo no estuvo", esgrimió. "Hubo otro equipo -el de la segunda parte- que trabajó, que lo intentó, pero no logró lo que se pretendía", explicó un Lasarte que esta vez sí acertó en los cambios. "Estrada creo que lo hizo bien, aunque jugó pocos minutos. Fue muy tarde nuestra reacción, cuando no nos quedaba la energía para doblegar al rival", argumentó.

Sobre los cambios, Lasarte esgrimió que "uno hace las cosas pensando que es lo mejor y al final, piensa en que podía haberlo hecho cinco minutos antes para haber crecido antes. Las cosas se hacen intentando lo mejor y a veces se acierta y a veces no. Quizá, con algunos minutos más, nos podrían haber dado esa frescura antes", consideró el charrúa. Un fin de semana más, Lasarte elogió el buen hacer de Griezmann. "Ha demostrado que es un jugador, más allá de la juventud y de lo que eso significa", afirmó el técnico txuri urdin. En este sentido, Lasarte fue más allá: "Ha demostrado madurez como deportista que es importante. En la primera mitad le vi más cercano al niño y en la segunda, con más incidencia en el juego". El de Macon aportó más por el centro. "Hacia dentro, él va mejor. En el futuro, es otro delantero u otro media punta, pero la necesidad del equipo es que juegue por la banda", matizó

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