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Aguirre dice que tuvo que haber «una serie de fallos en cadena» en la muerte del pequeño Rayán

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, señaló que la muerte del bebé Rayán tendrá que ser investigada "hasta el final" porque tuvo que haber "una serie de fallos en cadena". "Personalmente estoy consternada, como presidenta de la Comunidad,   verdaderamente abrumada. Lo que ha ocurrido es lo más grave que ha   ocurrido en el tiempo que llevo como presidenta en un servicio público madrileño", explicó a Onda Cero. "Evidentemente es un error   humano, pero habrá que investigar, llegar hasta el final y pedir   disculpas y ponernos a disposición de la familia", añadió la jefa del   Ejecutivo regional que consideró que lo que ha ocurrido "tiene una explicación muy difícil".  
   En este sentido, anunció que el Gobierno regional "va a tomar   todas las medidas que sean necesarias para que no se vuelva a repetir un hecho o una concatenación de hechos tan lamentables, tan trágicos  y tan terroríficos". La dirigente popular recordó que estuvo   visitando "personalmente" al padre del bebé, Mohamed. "Hace un mes   tenía una mujer, un hijo y ahora lo ha perdido todo", lamentó   Aguirre.  
   Por su parte, el secretario general del PSOE de Madrid, Tomás Gómez, dio sus condolencias a la familia y pidió responsabilidades   ante este "lamentable incidente". A su juicio, Esperanza Aguirre debería centrar su atención en la sanidad madrileña que "tiene unos niveles de organización caótica", en un día en que se celebra una   huelga en Atención Primaria y diversas asociaciones de profesionales médicos mantienen un encierro en protesta por el proceso   privatizador. "Madrid necesita un Gobierno fuerte capaz de sacar   adelante la economía madrileña, defender la educación y salvar la   Sanidad", sentenció.  
   Por último, la presidenta de la Asociación del Defensor del Paciente, Carmen Flores, solicitó la dimisión del gerente del   Hospital Gregorio Marañón, Antonio Barba, por acusar en público a una   enfermera de la negligencia que acabó con la vida del bebé sin   entonar antes el 'mea culpa'. Flores manifestó que Barba realizó una "mala gestión" que hizo "que una enfermera de 22 años se quedara sola   en un Servicio de Neonatología en el que no tenía experiencia", al   tiempo que amplió que esta circunstancia "se está dando también en   todos los hospitales grandes, donde el deterioro de la sanidad es constante".


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