La Patronal y los sindicatos continúan alineados. Ambos agentes sociales han vuelto a verse las caras este 15 de septiembre en el marco de la que ha sido la primera reunión de la comisión técnica creada expresamente ad hoc en torno a la cuestión relativa a las bonificaciones.

El encuentro, celebrado a puerta cerrada, ha estado presidido por la consejera de Hacienda, Transición Económica y Transformación Digital, Kissy Chandiramani. Al mismo, han concurrido -además de los habituales proponentes- representantes de la Administración General del Estado: había funcionarios tanto del SEPE como de la Tesorería General de la Seguridad Social.

La idea de crear un comité específico se puso sobre la mesa hace escasamente una semana con la pretensión de plasmar sobre el papel los posibles efectos adversos que el novísimo régimen de contrataciones podría traer consigo. Según ha revelado Emilio Postigo al término de la cita, "ha habido consenso por todas las partes".

Cada uno de los intervinientes ha elevado su propio informe resumiendo los inconvenientes que, a buen seguro, el nuevo real decreto provocará sobre nuestro maltrecho tejido productivo. El veredicto ha sido unánime: "Es totalmente negativo; perjudica claramente los intereses de Ceuta".

Asentado el convencimiento de que la ya vigente reglamentación derivará en graves perjuicios para la economía caballa, la comisión ha acordado -en palabras de Postigo- "elaborar un documento conjunto para enviárselo a todas las entidades que tengan algún tipo de responsabilidad en la materia". El objetivo final: "Instar al Gobierno a derogar la normativa".

Pese a que en estos momentos no hay posibilidad de entablar diálogo con Pedro Sánchez y sus ministros por estar estos en funciones, los actores que dan forma a la Mesa de Diálogo Social tienen intención de "mantener una reunión con el nuevo Ejecutivo en cuanto sea posible". A juicio de la parte sindical, Moncloa está obligada a "reconsiderar su postura". De persistir el inmovilismo, Postigo tiene claro que "vamos a tener un problema".

A decir verdad, el escenario sobrevenido resulta poco entendible si se tiene en cuenta que "se elaboró un Plan Estratégico que perseguía que se levantasen más negocios en Ceuta". "Esto va a provocar todo lo contrario", esgrimía el secretario general de Comisiones, quien se ha mostrado convencido de que "las cosas van a ir a peor".

Para rizar aún más el rizo, cabe la eventual posibilidad de "que no haya bonificaciones para nadie". Y es que, la coyuntura entraña un escollo añadido: "No se va a poder bonificar a familiares de primer y segundo grado". "En una ciudad tan pequeña como Ceuta, en la que hay muchos negocios familiares, esto supone un contratiempo enorme", lamentaba Postigo.

Al parecer, SEPE y Seguridad Social han tomado buena nota del malestar de empresarios y sindicalistas. Ambos organismos se habrían comprometido a "elevar todas las inquietudes a quien corresponda". "Están abiertos a pedir a los órganos del Estado todas las aclaraciones que sean necesarias", concluía el cabeza visible de CCOO.