Narbona ha recordado que es necesario que la Ciudad elabore un buen plan de gestión de residuos, ya que es su responsabilidad. El Ministerio ha dispuesto un presupuesto de seis millones de euros destinados a posibles soluciones, pero con la incineradora tan sólo como "última solución" después de que se hayan cubierto el resto de posibilidades. La ministra ha recordado que esta opción se baraja a veces como una solución fácil sin tener en cuanta otras consideraciones como el rechazo que puede ocasiona, pese a que la tecnología ha conseguido que estas instalaciones sean seguras y fiables.
Cristina Narbona también ha mostrado su preocupación por el estado del vertedero de Santa Catalina y, en especial, por los gases que pueden estar formándose en su interior. Un problema que puede convertirse en solución, con una infraestructura que permita utilizar esos gases para obtener energía, como se está haciendo en La Coruña. La ministra cree que en Ceuta puede instalarse un sector industrial aprovechando esta opción energética, además de con otras labores relacionadas con los residuos como el reciclaje.