Como se puede observar, si echamos un vistazo al panorama político de estas elecciones, ahora todos apuestan por aquellas propuestas que hacíamos ya desde que saltamos a la arena de la política local y que muchos intentaban desacreditar tachándonos como el partido de los arbolitos y los pajaritos, ahora parece ser que mucho han tenido que cambiar las cosas y aquellos que hasta no hace mucho hacían sorna, ahora se intentan apropiar en su discurso de gran parte de nuestras ideas y proyectos.

Hoy a priori, todo están de acuerdo que a Europa hay que llevar proyectos reales, a sabiendas de que para poderlos financiar con subvenciones comunitarias, estos deben llevar la impronta de la sostenibilidad. En esa línea se encuentran muchos de esos proyectos por los que tanto hemos luchado desde los Verdes y que con algo de visión de futuro se podrían poner en activo, ideas ajustadas a los tres pilares fundamentales de nuestra economía, comercio, turismo y aprovechamiento sostenible de nuestro entorno natural.

Para los que han seguido durante todos estos años nuestra acción política, habrán podido observar que la mayoría de nuestras propuestas siempre han venido unidas a la idea y necesidad de generar empleo, mal endémico de esta ciudad. Es solo ahora cuando algunos avispados han entendido que teníamos razón, cambiando de manera oportunista su discurso y erigiéndose en paladines de todo lo sostenible. Nada mas alejado de la realidad, pues esto no es mas que una prueba evidente del intento de engancharse al carro del momento, para ver si por ese lado se arrastran algunos de los votos que alguna que otra encuesta les quita y así seguir con su venta de humo a la ciudadanía, en su intento de convertir a Ceuta en algo mas parecido a una ONG, que en una ciudad moderna, prospera y sostenible.

Nosotros, sí los Verdes, sin sucedáneos ni aditivos, siempre hemos creído en la importancia manifiesta de la formación de nuestros jóvenes de cara al empleo y en especial en aquellas áreas que son receptoras del estímulo comunitario, por lo general y como ya apuntamos, relacionadas con la puesta en activo de nuestros recursos naturales a través de un turismo sostenible y de la protección del medioambiente. Reforestación, apuesta por la energías renovables, en especial en aquellas zonas de nuestra ciudad que por su antigüedad mas necesitadas están de infraestructuras que permitan el acceso a energías menos contaminantes y mas limpias o el retorno a una industria agropecuaria sostenible que como la del salazón han sido tradicionalmente el medio de vida de muchas de las familias afincadas en la ciudad, son algunas de las propuestas que hemos defendido en estos años.

Eso si, sin obviar otros proyectos como en los que interviene directamente instituciones como la Confederación Hidrográfica del Gualdaquivir, en los que se pretende poner en activo los recursos hídricos locales y en los que a título personal he podido intervenir aportando nuevas ideas y soluciones, o como el de la creación de una Escuela Superior de Hostelería, pues no debemos olvidar que el turismo será el motor que va a estar moviendo por largo tiempo nuestra economía y Ceuta no debe ser ajena a ello, con lo que de la existencia de unas adecuadas infraestructuras y de unos profesionales cualificados para ponerlas en servicio, va a depender el desarrollo de un turismo local, que directa o indirectamente puede generar un empleo de calidad y estable para nuestra ciudad.

Todo lo expuesto y mucho mas, han sido las apuestas que durante todos estos años hemos hecho desde los Verdes Grupo Verde para la ciudad de Ceuta, las hemos defendido día a día, incluso sin tener representación en la asamblea. Y lo seguiremos haciendo, en estas europeas aun sin concurrir de manera directa a los comicios, apoyamos y pedimos el voto de aquellos que creen en nuestra labor y que han participado de nuestro proyecto y de la ciudadanía en general para “Recortes Cero”, porque creemos que es esta agrupación de ciudadanos la que mejor puede dar voz en Europa a lo que desde tantos años venimos defendiendo, totalmente alejados de intereses o de partidismos.

Es posible que en nuestro camino nos intenten convencer de que hay gaviotas verdes, rosas verdes e incluso que hasta una caballa puede ser verde, cosas extrañas o inverosímiles, sobre todo para quien sabe que el sentimiento verde, el deseo por una ciudad prospera y sostenible, es algo que se siente, por lo que se lucha y defiende a diario, quedando alejado de simples cálculos electorales o del mero oportunismo político.