Los sucesos de Crimea y el problema de la inmigración, son aldabonazos que ponen de relevancia la importancia del sesgo que adopte la U.E.

Existe una Alta Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad. Su estructura de funcionamiento y los servicios de apoyo son bastante completos. Otra cuestión es la eficacia y los resultados que se obtienen y las posibles causas, que también abordaremos. Según fuentes de las Instituciones de la Unión Europea, de un modo somero haremos alusión a algunos de los órganos en este tema. Por lo que afecta al Parlamento Europeo destacan la Comisión de Asuntos Exteriores, la Subcomisión de Seguridad y Defensa y la Comisión de Comercio Internacional. Los Asuntos Exteriores constituyen uno de los foros más destacados del Consejo de la Unión Europea. En la Comisión Europea se encuentra el Servicio Europeo de Acción Exterior. También la política exterior está incluida en el Comité Económico y Social Europeo, en el Comité de las Regiones y en el Banco Europeo de Inversiones, que llega a zonas de todo el planeta, especialmente: África, Asia, Latinoamérica y la Zona mediterránea.

Deteniéndonos en África. El dos y tres de abril de 2014, está prevista la cuarta cumbre de la UE y la Unión Africana sobre el tema: “Las población, la prosperidad y la paz” Esperemos que los resultados sean eficaces y prácticos. Respecto al Banco Europeo de Inversiones, el objetivo principal con el África subsahariana, es contribuir al crecimiento económico y reducir la pobreza, con la creación de empleo y mejorar el acceso a los recursos productivos. La financiación que ejerce va destinada a favorecer: Los sectores financieros locales. El crédito para las pequeñas y medianas empresas. Proyectos de infraestructuras en energía, agua, transporte y telecomunicaciones. El acceso a los recursos alimentarios… Sin duda, hasta ahora los resultados son insuficientes. Pese a las buenas intenciones, el trabajo de las Instituciones de la UE debe ser más tenaz, eficaz y persistente, para cubrir las expectativas.

La creación de la SEAE (Servicio Europeo de Acción Exterior), que entró en vigor el uno de diciembre de 2009, gracias al Tratado de Lisboa, se apoya en una red de 139 delegaciones de la UE y oficinas por todo el mundo y asiste a la Alta Representante de Asuntos Exteriores. Pero como en economía y la política social, la mayor representación de la derecha europea impide que exista una política global común, al servicio de los intereses sociales y solidarios. Alemania lleva el protagonismo y mientras existan varias voces y falte una coordinación real, Europa no logrará tener la relevancia internacional que a la U.E. le corresponde.

España, con el anterior Gobierno estuvo trabajando y llevando una política cercana y en contacto con los países africanos que originan la fuerte emigración hacia nuestro país, pero como manifestaba Elena Valenciano refiriéndose a la inmigración. ” Solos no podemos, pero la política de inmigración de la U.E. no puede ser solo una gran puerta cerrada al resto del mundo… Este Gobierno no hace lo suficiente, toda la política hacia África que se había desarrollado en los últimos años se ha parado”. Por supuesto, como hemos mencionado, es necesaria también una mayor y eficiente colaboración de la UE. Circunstancia que también puso de relieve la socialista ceutí, candidata al Parlamento Europeo y miembro de la Ejecutiva de José Antonio Carracao, Izaskun Bernal Cerdeira.

Haciendo referencia al Manifiesto hacia una nueva Europa, que presenta la Socialdemocracia, podemos extraer algunos de sus objetivos: “ Debemos crear sólidas alianzas para responder a los retos comunes. Queremos que Europa se haga oír y disponga de los instrumentos adecuados para liderar la promoción de la paz, la democracia y una prosperidad compartida en todo el mundo…fortaleceremos las relaciones con toda la región del Mediterráneo…Debemos combatir los desequilibrios y la pobreza mundiales fomentando la coherencia de las políticas para el desarrollo y hacer que los Objetivos de Desarrollo del Milenio y la Agenda de Desarrollo Post 2015 de las Naciones Unidas sean todo un éxito… Es necesario una Europa Unida, con más fuerza en el ámbito internacional”.

Si queremos una Europa con más protagonismo en el concierto internacional, no puede quedar relegada a ser la subalterna de la política de Washington, actuar de un modo pusilánime y con lentitud. Pero hace falta mayor unidad, mayor colaboración y más preocupación por una participación más democrática, y que no sean dos o tres países los que lleven la iniciativa, mientras el resto se limita a seguir las “instrucciones”. Aproximadamente en dos meses los ciudadanos europeos vamos a poder emitir nuestro voto, Cada persona es libre de adoptar la decisión que considere más idónea. A mi modo de entender, cuanto mayor sea el número de votos independientemente del color político, puede favorecerse otro modo de dirigir la política europea, y por supuesto, el rumbo de su política exterior.

El tiempo de la guerra fría ha pasado. Ya no se puede vivir de espaldas a los problemas económicos y políticos de zonas especialmente deprimidas del mundo, algunas de ellas cercanas a las puertas europeas. La necesidad de promocionar y potenciar las economías, las democracias, evitando que el poder se limite a una casta que saquea a una mayor parte de la población. Vigilar y actuar con el peligro de la expansión del integrismo, la necesidad de proyectar los planteamientos de la U.E. en los principales foros mundiales, hacen imprescindible y perentoria una política europea exterior fuerte.

Es necesaria para Europa y para favorecer el equilibrio mundial, donde emerjan otros postulados que prioricen la paz, la justicia social y el respeto a los derechos humanos. Una mayor unidad, la cooperación interna y externa, la defensa y la creencia en las posibilidades de la U.E., basadas en los ideales de las democracias más consolidadas del mundo, que no pretenden la expansión imperialista, provocarán también el respeto a nuestras ideas y proporcionará más seguridad a la paz y el incremento del desarrollo en el mundo.