- Desde el Partido Popular siempre hemos manifestado nuestro firme compromiso con las Comunidades Autónomas.

Cuando llegó al Gobierno, nuestro partido se encontró con unas comunidades en situación límite de insostenibilidad presupuestaria debido a la mala gestión del anterior Gobierno Socialista. Ante este desesperanzador escenario económico, el Gobierno de Mariano Rajoy ha venido realizando, desde el pasado mes de enero, un gran esfuerzo para financiar la deuda de las CCAA, ante las dificultades en las que se encuentran para salir a los mercados.

Nuestro país atraviesa un momento muy difícil, y no hay otra alternativa que cumplir el objetivo de déficit comprometido. Por ello, el Gobierno ha tenido que tomar medidas muy concretas.

Primero, lanzando una línea ICO por hasta 15.000 euros y retrasando hasta diez años la devolución de lo que cobraron de más por la pésima administración presupuestaria que hizo el PSOE en los años 2009 y 2010, lo que les ha supuesto liquidez por 3.156 millones de euros. Además, se les ha concedido a las CCAA anticipos por más del 50% de la liquidación estimada del sistema de financiación correspondiente al año 2010.

La Administración Central asumió en solitario, sin repercutirlo a las CCAA, la reducción de déficit al 5,3 a la que obligó a Bruselas en abril al Estado español, por lo que ahora, igualmente, es el Estado quien asume la ampliación al 6,3. Así que, pese a las duras restricciones presupuestarias, el Gobierno ha aplicado en su totalidad el sistema de financiación autonómico que beneficia claramente a las Comunidades Autónomas.

Por último, el Gobierno acaba de aprobar un Fondo de Liquidez de ayuda para aquellas comunidades que no puedan refinanciar su deuda. En este sentido, y con el sostén de la Ley de Estabilidad Presupuestaria, el Ministerio de Hacienda y las Administraciones Públicas, está haciendo un seguimiento estricto de la ejecución presupuestaria de 2012, y ha llamado a reuniones bilaterales a las CCAA que pueden estar en riesgo de no alcanzar el 1,5% para, de manera conjunta, analizar esa ejecución presupuestaria y las medidas a abordar. A nuestros socios europeos y a los mercados, les tiene que llegar un mensaje claro: España es un país que cumple sus compromisos y que reduce el déficit.

Nuestro Gobierno está haciendo el principal esfuerzo, ha establecido la legislación básica y ha asumido el coste político para que todas las CCAA puedan cumplir en educación, en sanidad y en la función pública.

Pero hay que lamentar que se use la confrontación como excusa para no cumplir con los objetivos, cuando en momentos como estos, todas las administraciones están trabajando en la misma dirección: La estabilidad presupuestaria de todas las Comunidades Autónomas. Ese es el gran reto del Gobierno de Mariano Rajoy y el primer paso para que España recupere la confianza que hoy necesita más que nunca.