- sábado 04 mayo 2024
La Audiencia Nacional ha condenado a 14 años de cárcel al presunto etarra Ismael Berasategui Escudero por su participación en la colocación de un coche-bomba en el aeropuerto de Málaga el 26 de julio de 2001, que pudo ser desactivado por los Tedax, pero que causó un "peligro real para la multitud" de personas que se encontraban en el lugar.
En concreto, la Sección Tercera de la Sala de lo Penal ha considerado que Berasategui, que se negó a declarar en el juicio, es culpable de un delito de estragos terroristas en grado de tentativa, de un delito de robo de vehículo a motor con finalidad terrorista y de un delito de falsedad en documento oficial con igual finalidad.
En la sentencia, hecha pública hoy, el tribunal señala que la "amplia prueba testifical y pericial" llevada a cabo acredita "suficientemente" la culpabilidad del procesado en estos tres delitos.
Según el relato de hechos probados, Berasategui, presunto miembro del comando 'Behorburu', y Ainhoa Barbarín, ya condenada a 14 años de cárcel por esta causa, se encargaron de trasladar hasta Málaga un vehículo con las placas dobladas en el que habrían colocado un artefacto explosivo con 53 kilos de Titadine-dinamita.
Berasategui y Barbarín formaban junto a Xabier Zabalo Beitia, también condenado por la Audiencia Nacional por esta causa, el denominado comando 'Behorburu', dedicado a la preparación de vehículos, previamente sustraídos, para su preparación y posterior utilización como coches bombas.
Para este fin, Berasategui y Zabalo montaron un taller de lavado de vehículos, que, según explica el tribunal, utilizaban "dentro de la actividad que los tres venían desarrollando como integrantes del 'comando legal Behorburu'".
En el registro del domicilio del procesado, los agentes encontraron las placas de matrícula originales del vehículo utilizado en atentado frustrado y en la empresa que constituyó junto a Zabalo, la documentación del automóvil robado y anotaciones manuscritas de varios teléfonos móviles, entre ellos el del aparato que fue utilizado para reinvindicar el coche bomba de Málaga.
El tribunal sostiene que el "conjunto de pruebas" permite concluir que el ahora enjuiciado y los dos ya condenados "fueron los que en el proyecto común y unitario que conformaba la actividad del comando sustraen el vehículo, sustituyen las placas de matrícula, preparan el artefacto explosivo y ubican el coche-bomba en el aeropuerto de Málaga, dispuesto para su explosión temporizadan a las 8 horas del 26 de julio de 2001".
La sentencia recalca además la "capacidad destructiva" del coche-bomba, ya que "el maletero donde se ubicaba el explosivo estaba dirigido hacia la zona de llegada de los viajeros, en la planta baja del aparcamiento que soporta la estructura del mismo y sobre el que pasa la carretera de salida", lo que suponía "un peligro para la vida e integridad física" de los usuarios del aeropuerto".
Berasategui huyó a Francia y fue detenido el 15 de mayo de 2002, pero logró escapar de una cárcel francesa, después de que su hermano lograra suplantar su identidad tras una entrevista en la sala de visitas. El presunto etarra fue detenido de nuevo en enero de 2003 en el suroeste de Francia y fue entregado de manera temporal a las autoridades españolas el pasado 18 de febrero, junto a Aitor Cortazar.
El operador de los principales aeropuertos británicos BAA, propiedad del grupo español Ferrovial, anunció hoy la venta del aeropuerto londinense de Gatwick a una entidad controlada por Global Infrastructure Partners.
En un comunicado remitido a la Bolsa de Londres, BAA indica que este fondo de infraestructura pagará 1.510 millones de libras (unos 1.661 millones de euros) por el cien por cien del capital.
El año pasado, la Comisión de la Competencia inglesa le exigió a BAA que vendiera los aeropuertos londinenses de Gatwick y Stansted y uno de los dos escoceses -Glasgow o Edimburgo- por considerar que afectaba la competencia.
En la nota divulgada hoy, el operador señala que del precio acordado para la venta, 55 millones de libras (unos 60 millones de euros) estarán condicionadas al rendimiento del tráfico y de la futura estructura del capital del comprador.
Las ganancias de la venta serán utilizadas principalmente para pagar parte de la actual deuda de BAA.
En el comunicado, el operador recuerda que anunció sus planes de venta de Gatwick en septiembre de 2008, antes de que terminara la investigación de la Comisión de la Competencia sobre el mercado de los aeropuertos del Reino Unido.
El consejero delegado de BAA, Colin Matthews, resaltó hoy que Gatwick, al que calificó como uno de los aeropuertos "internacionales líderes", ha sido siempre parte central de BAA. "BAA -puntualizó- se concentrará en mejorar Heathrow y otros aeropuertos".
La venta está sujeta al visto bueno de la Comisión Europea y se espera que quede concretada el próximo mes de diciembre.
Según informa hoy el diario "Financial Times" (FT), BAA esperaba en un principio vender Gatwick por unos 1.800 millones de libras (unos 1.980 millones de euros) y no parecía estar a favor de venderlo por debajo de 1.600 millones de libras (unos 1.760 millones de euros).
La firma Ferrovial compró BAA en el año 2006 por más de 10.000 millones de libras (unos 11.000 millones de euros).