Apela a "los ritmos diferentes" para explicar los procesos pendientes

La ola democratizadora que recorre el Magreb y Oriente Próximo no ha llegado aún a Siria. Una de las autocracias más férreas de la región, y adonde recaló ayer la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, quien dijo estar convencida de que "pronto" se podrán "ver avances que pueden ser muy importantes para Siria y para la región". A esta conclusión llegó después de entrevistarse con el presidente del país, Bachar al Asad, y varios de sus ministros en su tercer día de gira por Oriente Próximo. Ante ellos y de manera "franca, directa y clara", según calificó la conversación, Jiménez expuso su mensaje sobre las bonanzas de la ola democratizadora que están viviendo Túnez y Egipto: "El proceso de cambio en el mundo árabe es enormemente estimulante y abre grandes oportunidades". No obstante, apuntó que existen "ritmos diferentes teniendo en cuenta las circunstancias diferentes que hay en cada país".

Israel está preparado para reanudar las conversaciones de paz indirectas con Siria, "sin condiciones previas", según informó hoy la Oficina del Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
       La Oficina respondía así al ofrecimiento hecho hoy por el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, quien antes de viajar a la ciudad siria de Alepo dio a conocer su disposición de reanudar su mediación en las negociaciones de paz entre Israel y Siria, interrumpidas desde principios de año.
       "Israel está preparado para iniciar conversaciones de paz con Siria sin condiciones previas, ni por parte de Israel ni por parte de Siria", dijo a Efe Mark Regev, portavoz del jefe del Gobierno israelí.
       "El primer ministro ha dicho claramente que está dispuesto a viajar a Damasco si es necesario para negociar sobre la paz", subrayó el portavoz al aludir a un discurso que pronunció en el mes de junio Netanyahu en el que dijo que estaba dispuesto a viajar a cualquier capital regional si hiciera falta para negociar de paz.
       El anterior gobierno de Israel, encabezado por Ehud Olmert, mantuvo negociaciones de paz con Damasco entre mayo y diciembre del año pasado con la mediación de Turquía, país predominantemente musulmán pero no árabe y que históricamente mantiene buenas relaciones con el Estado judío.
       Sin embargo, Siria y Turquía suspendieron esos contactos a principios de año, después de que Israel lanzara una masiva ofensiva militar en la franja de Gaza, y no se han reanudado con la subida al poder en marzo del Ejecutivo de Netanyahu.
       El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, el ultraderechista Avigdor Lieberman, ha descartado cualquier retirada de su país de la Meseta del Golán como requisito para lograr la paz con Siria, según publicó en el mes de abril el diario "Haaretz".
       Se trata de un territorio ocupado por Israel en la Guerra de los Seis Días (1967), no reconocido internacionalmente, y que Damasco reclama para firmar un acuerdo de paz con el Estado judío.