Menos de 20 kilómetros. Una distancia insignificante en la era de la globalización, que si el viento quiere son insalvables y ocasionan un montón de historias tristes, de indignación y de malestar. Más si el tradicional temporal que suele saludar la llegada del invierno aparece con toda su crudeza el día de Navidad. Cientos de ceutíes han sufrido este miércoles la ira del viento, su castigo han sido horas de espera en las estaciones marítimas de Algeciras y Ceuta sin saber si al final podrían coger el barco que les acercara a su destino.

Una vez más el castigo ha sido mayor por culpa de la falta de información de las compañías navieras hacia sus desesperados clientes. El buque lento de Baleària, Passió Per Formentera ha zarpado finalmente desde el puerto de Ceuta en dirección a Algeciras sobre las 21.20 horas con idea de regresar desde Algeciras y retomar sus servicios con normalidad el jueves a partir de las 6 de la mañana.

Usuarios de Ceutaldia.com que han podido embarcar en ese barco –no había plazas para todos los que querían viajar- han asegurado que el “barco no se movía demasiado”, señal de que el temporal esta amainando con la misma velocidad con la que arreció y la previsión es que no haya problema alguno para la navegación durante el jueves desde primera hora de la mañana.

Las olas de hasta 4 metros han hecho inviable que durante todo el día cruzara el Estrecho barco alguno. Así, en Algeciras, la peor parte la llevaban los que querían ir a Tánger, mucho más numerosos que los que querían embarcar a Ceuta. La Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras se ha visto obligada a habilitar parte de las explanadas para vehículos que suele habilitar para las esperas durante la Operación Paso del Estrecho en verano, según han relatado a Ceutaldia.com algunos viajeros.

Viajeros que tanto a uno como otro lado han vuelto a acusar de mala gestión a las compañías al no facilitar información alguna. En taquilla a los usuarios en Ceuta se les ha llegado a vender billetes para una supuesta salida a las 15.30 horas que nunca llegó a producirse. El consejo en taquilla era el de cerrar el billete para garantizarse entrar en el primer barco que saliera.

En Algeciras un ceutí que finalmente se dio la vuelta a un domicilio familiar en Málaga con la esperanza de poder viajar este jueves. Espero desde las 14.30 hasta las 17 horas en la zona de embarque sin que nadie le diera información. A pesar de que sobre las 14 horas Capitanía Marítima en Ceuta sabía ya que la intención de Baleària era zarpar con el Passio a partir de las 18 horas cuando fuera posible. Finalmente no fue a las 18, pero sí a las 21 horas. Una información que en manos de los que esperan a tiempo, hubiera evitado sufrimientos innecesarios.

Otros muchos se han pasado el día de Navidad entero en la estación Marítima de Ceuta hasta que finalmente han podido irse a las 21 horas, otros más yendo y viniendo a la estación marítima para saber cómo iban las cosas y si salían o no barcos.

Tampoco ha habido ni mantas, ni agua, ni comida, tal y como obliga la legislación y aconseja la cortesía y la humanidad. Ni en Ceuta, ni en Algeciras.

Y otros aún no podrán embarcar este miércoles y tendrán que seguir esperando, a pesar de llevar ya horas haciéndolo. Los más afortunados lograrán llegar a sus destinos tarde, muy tarde, y probablemente no olvidarán en mucho tiempo este día de Navidad de temporal y viento.

Muchos de esos pasajeros cuyo destino es Tánger lo tienen aún peor. Según ha relatado un viajero a Ceutaldia.com algunos han ocupado por la fuerza oficinas vacías o cerradas sin que nadie haya hecho nada en la Estación Marítima de Algeciras por impedirlo. Ahí pasarán la noche.