Resulta contradictorio comprobar como algunos medios de comunicación tanto, locales como nacionales, ofrecen informaciones argumentadas en la rumorología, en las informaciones interesadas provenientes del anonimato o de los datos recogidos por determinadas empresas relacionadas con las investigaciones sociológicas, empresas encuestadoras. Informaciones interesadas en mediatizar exclusivamente a una opinión pública curtida en años de democracia.
Pues bien, a nivel nacional, debo recordar como la semana pasada los españoles tuvimos conocimiento de cómo el partido socialista había recortado en 3,1 puntos la ventaja que el partido popular había alcanzado en los últimos meses como consecuencia de las últimas cifras conocidas, de las últimas decisiones adoptadas y de los pactos alcanzados con algunas formaciones nacionalistas. Una información abalada por los datos proporcionados por una empresa contratada por este mismo medio para realizar un sondeo de opinión entre un determinado colectivo de la sociedad española.
No obstante, esta información podría sufrir una importante transformación en los próximos días con motivo de los últimos datos dados a conocer en relación a la venta de vehículos en el último mes, un mes catalogado por todos los especialistas del sector como el mejor de todo el año. Las ventas de coches han descendido un 24%, el mayor descenso de los últimos meses. Por tanto, los brotes verdes que parecían haber germinado desaparecen súbitamente como consecuencia inmediata de las actuaciones erráticas de un Ejecutivo cuyos integrantes se afanan duramente por conservar una posición privilegiada en el partido en lugar de buscar soluciones a los gravísimos problemas que ellos mismos han causado a la ciudadanía.
No puedo finalizar mi reflexión de hoy sin mencionar las últimas informaciones publicadas por un medio de comunicación local en relación al cese y posterior nombramiento del que fuera Superintendente de la Policía Local de Ceuta. Sin lugar a dudas, un excelente profesional que no ha pasado inadvertido para quienes se han beneficiado en innumerables ocasiones de sus informaciones privilegiadas. En definitiva, los ciudadanos recibimos informaciones interesadas provenientes de unos medios de comunicación que olvidan elementos fundamentales en la relación con el ciudadano, con su cliente final; la independencia informativa, la constatación de las informaciones y por supuesto, la credibilidad de quien ocupa el decanato de los medios de comunicación locales.
