- domingo 28 abril 2024
El Tour de Francia, evento deportivo opulento y grandilocuente donde los haya, ha sufrido también en sus carnes las consecuencias de la crisis económica mundial. El Tour ya no es lo que era, aunque hay que reconocer que si no lo hubiéramos visto antes, ahora, tal como es, nos parecería la corte de María Antonieta, que se hizo construir un palacio donde ahora está el Hotel Crillón, para dar clases de música.
El Tour es Nueva York comparado con sus competidoras, las demás carreras como Giro y Vuelta, por ejemplo, que a su lado parecen poblaciones agrícolas de mil habitantes. Sin embargo, su grandeza se ha visto mermada este año en cientos de pequeños detalles que sólo los asiduos seguidores son capaces de detectar. Por ejemplo, el libro de ruta, antaño editado como si fuera un libro de fotografías de antiguos aviones, por poner un ejemplo gráfico, es ahora un cuaderno con espiral al que has de mimar cuando pasas hojas, no sea que te quedes con éstas en la mano. Las credenciales de los invitados, antes una pulsera de plástico, son ahora de cartón. Las guías turística e histórica, antes en un libro también estupendamente editado, comparten ahora un CD de ordenador.
La salas de prensa, los años pasados habilitadas en palacios de deportes o salas de exposiciones en las que se amontonaban los periodistas, se ubican también en este tipo de lugares, pero el espacio con que cuenta cada enviado especial se ha doblado o triplicado respecto al de antes. Precisamente es el colectivo periodístico uno de los que más acusa la recesión económica. A pesar de que los jefes de prensa, Christophe Mercadier y Matthieu Desplats, aseguran que el número de enviados especiales se mantiene respecto al de los años anteriores, asegurando que la solicitud de acreditaciones no aumenta o disminuye según quienes sean los ciclistas que corren el Tour (no reconocen, por ejemplo, que Lance Armstrong arrastra muchísima prensa), es evidente que por parte de los países europeos ha disminuido el número de periodistas acreditados en el Tour. Sólo hay un país cuyo número ha aumentado ostensiblemente. "Un país ha doblado el número de enviados: Japón", manifiesta Mercadier. El año pasado eran 20 entre redactores y fotógrafos, y este año son 42 siguiendo a los tres compatriotas que comenzaron la carrera. Los que siguen el Tour entero son unos 1.200, y en el paso por Barcelona "se produjo un pico de solicitud de acreditaciones llegando hasta 1.700", añade Desplats.
No se habla de dopaje
Y siguiendo con los 'media', los años pasados Credit Lyonais, un importante banco francés, tenía la gentileza de repartir los periódicos a los periodistas de forma gratuita, cada día en la salida de las etapas. Ahora sigue haciéndolo, pero las solicitudes no se hacen por periodista, como siempre, sino por vehículo seguidor. "No es por la crisis
El debate más tenso del pleno de marzo ha sido sin duda el que ha enfrentando por un lado al portavoz de UDCE-IU, Mohamed Alí, y por otro a la consejera de Medio Ambiente, Yolanda Bel, e incluso al presidente Vivas sobre la propuesta del grupo opositor de estudiar la posible rescisión del contrato de limpieza de Urbaser. La intención del Gobierno de paliar con las arcas municipales la subida del sueldo de los trabajadores de la empresa ha terminado en un crudo enfrentamiento, con acusaciones veladas y no tanto, en el que el Gobierno ha cerrado filas en defensa a ultranza de la empresa y de la gestión de la limpieza desde la llegada de Vivas al poder, precisamente y según han denunciado partirdos como el PSPC desde hace años con el contrato de Urbaser como uno de los puntales de la negociación que promovió el derrocamiento de Antonio Sampietro y el GIL. El punto más destacado de lo sucedido es sin duda que la consejera de Medio Ambiente ha ofrecido a la empresa un revisión del contrato para incluir esa subida de sueldo sin haber consultado ni recibido informes de la Intervención o la Secretaría General. Un hecho del que se ha responsabilizado el propio Juan Vivas.
La población empadronada en Ceuta se situó en el año 2006 en 75.861 personas, 585 más que a finales de 2005, según los datos del padrón publicados por el Instituto Nacional de Estadística. El 50,85 por ciento de la población, 38.581 personas, son hombres, y el 49,15 por ciento, 37.280, mujeres. En cuanto a grupos de edad, el más numeroso es el comprendido entre los 25 y los 29 años, 6.654 empadronados, y el menor el de mayores de 85 años, con 682 personas.
El número de trabajadores extranjeros afiliados a la Seguridad Social en Ceuta llegó, según los datos a fecha del 31 de octubre, a 2.150, lo que supone un incremento de 8 personas con respecto a las cifras del mes anterior. La mayoría pertenecen al régimen general, 1.299, mientras que 613 están empleados en el hogar, 179 son autónomos, 57 trabajan en la mar y 2 pertenecen al régimen agrario. El número de extranjeros afiliados en Ceuta es el menor de toda España, incluso por debajo de Melilla, que se sitúa en 3.571 personas.