El culebrón de la corrida de toros. Cronología de una “polémica artificial”

El culebrón de la corrida de toros. Cronología de una “polémica artificial”
Plaza de toros portátil
Plaza de toros portátil
Rontomé lamenta las críticas de ambos frentes: “Para los animalistas somos unos maltratadores de animales y para los taurinos, la derechita cobarde”

Siete días después, la polémica sobre la cada vez más improbable corrida de toros sigue coleando. Este viernes, el portavoz accidental del Gobierno y consejero de Cultura, Carlos Rontomé, ha respondido al empresario taurino, Esteban Díaz, promotor del festejo taurino, después de que éste acusara al Gobierno de la Ciudad de poner trabas y actuar de “mala fe” impidiendo la celebración de la lidia.

Rontomé ha querido dar claro que, como Administración, no se va oponer al festejo taurino y aunque quisiera tampoco podría. Se trata de un festejo con animales perfectamente legal y no considerado maltrato animal por la Ley nacional ni tampoco, ha apuntado, en el anteproyecto de Ley que preparan PSOE y Unidas Podemos. Eso sí, el proceso administrativo es muy complejo, más aún al tratarse de Ceuta, y es muy estricto al ser un festejo de sangre que conlleva sus riesgos para el torero y también ara el público. Una tramitación que, a juicio del consejero, hace inviable los plazos que pretende la promotora, que planteó el “proyecto” exactamente a un mes vista de su celebración.

Así y todo, la empresa promotora no ha iniciado aún más trámites que los de la solicitud de la ubicación, ahora en la explanada de muelle de Ponente, en terrenos portuarios, pendiente de resolución. Aunque, advierten fuentes portuarias, el trámite también es lento y la Autoridad Portuaria debe antes recabar los necesarios informes jurídicos y de seguridad, lo que hace un poco más difícil que todo esté listo para la fecha elegida, el 18 de septiembre.

Para aclarar las acusaciones del empresario y clarificar el proceso, el responsable de Cultura ha querido ofrecer su punto de vista de la cronología de una “polémica artificial en muchos sentidos”. “Como Administración no podemos poner ningún tipo de obstáculo, la tauromaquia es legal, es un espectáculo reglado. Si se cumple con todo hay que autorizarla”, ha insistido.

Cronología de una “polémica artificial”

El primer contacto entre la Ciudad y el empresario de Taurohispania Millenium, empresa promotora, fue en la tarde del 18 de agosto, justo un mes antes de la fecha elegida para la corrida de toros, coincidiendo con el aniversario de la Legión, que este 2022 cumple 102 años. Una premura que ya supone el primer handicap para lo que el empresario presentó como “un proyecto, una intención”, recuerda el consejero. Ya en esa primera cita, ha explicado Rontomé, aviso a Diaz de que “los plazos jugaban en contra”. Y no solo por buscar la ubicación, sino por el resto de la tramitación necesaria. “El Reglamento taurino es nacional y es bastante exigente en cuanto a documentación, en cuanto a todo lo que hay que cumplir y el tiempo es escaso”.

Pero, para sorpresa de Rontomé, apenas 24 horas después se encontraba con la noticia en medios especializados dando por sentada la celebración de una corrida de toros goyesca en homenaje a la Legión el 18 de septiembre en Ceuta, “27 años después”.

La noticia corrió ya ese viernes 19 como la pólvora por redes sociales. Y los acontecimientos comenzaron a precipitarse. Los animalistas convocaron una protesta, el próximo 5 de setiembre frente al Palacio Autonómico; el senador de Compromís, Carles Mulet, presentó una serie de preguntas parlamentarias al respecto y el domingo la propia Comandancia Genera de Ceuta (COMGECEU) emitió un comunicado desvinculándose del festejo taurino. Un aspecto que ha dolido especialmente al diestro, Sebastián Ritter, enamorado de la Legión, y al empresario, que asegura que hasta entonces, “mandos” del Tercio estaban entusiasmados con la idea.

“Me puse en contacto con el empresario —recuerda Rontomé— para plantearle que lo que me había dicho no concordaba con lo que dice la Comandancia, porque él constantemente lo relacionaba, que era un homenaje, pero el caso es que la Comandancia se desliga. Y media hora más tarde mete por Registro, por sede electrónica, para celebrar en los bajos de la Marina la corrida de toros. Cuando accedo a la documentación el lunes veo que la solicitud viene acompañada por un proyecto de plaza de toros portátil pero que esta equivocado, es para otro Ayuntamiento —Gandía, según ha podido saber Ceuta al Día—. Se ve que con las prisas mandaron un proyecto equivocado. Se lo hago saber y que falta mucha documentación, como responsabilidad civil, o plan de situación, que ni siquiera hay, solo dicen los bajos de La Marina”.

Los servicios jurídicos de la Ciudad lo tuvieron claro desde el principio: en los bajos de la Marina no podía ser. Se trata de una cesión de la Autoridad Portuaria y no puede ser cedida a su vez a un tercero. “Él a pesar de eso da una rueda de prensa y sigue insistiendo en que va celebrar la corrida”.

El empresario, ha explicado Rontomé, barajó emplazamientos alternativos. Dos de ellos, Las Heras y Loma Margarita,  presentaban el mismo inconveniente que el parque urbano de la Marina, al ser uno de ellos propiedad del Ministerio de Interior  (el solar del antiguo cuartel de Las Heras) y el otro, (la explanada de Loma Margarita) de Defensa. La tercera vía pasa ahora por la explanada de La Puntilla, suelo portuario. La pelota está ahora en el tejado de la Autoridad Portuaria, que no ha recibido la solicitud formal hasta la tarde de este jueves. 

Presiones políticas

“Para el Gobierno se trata de una cuestión puramente administrativa (…) legalmente no nos podemos oponer, otra cosa es que consigan el espacio”, ha querido remarcar Rontomé, insistiendo en que en ningún momento se han visto condicionados por las “presiones políticas” que aduce el empresario. Unas críticas que no les han pillado desprevenidos. Sabían que en esta cuestión, el Gobierno tenía todas las de perder. 

“Teníamos claro que la propia empresa iba a aducir presiones, que se estaba dilatando de forma artificial, y por otro lado los animalistas nos podían llevar al Juzgado por ceder algo que no podíamos ceder. (…) Nosotros nos hemos guiado por una cuestión puramente legal y administrativa. Las presiones políticas sabíamos que iban a venir por los dos lados: si finalmente se realiza la corrida de toros iban a decir que somos unos maltratadores de animales y si no se realizaba que somos la derechita cobarde. Eso lo teníamos asumido”.

El culebrón de la corrida de toros. Cronología de una “polémica artificial”


Entrando en la página solicitada Saltar publicidad