Live different

Reconozco que durante gran parte de mi vida yo también pertenecí al bando contrario. Consecuencia obligatoria de mi educación informática, supongo. Me crié entre PC's, con un DR-DOS bajo el brazo, discos de arranque y con la ferviente idea de que un ratón era una pijotada sin sentido en el mundo de los ordenadores de verdad. ¿Macintosh? Una bobada con la que timaban a inútiles sin puñetera idea de escribir un comando, reducto elitista de tres diseñadores con ínfulas. Los informáticos de verdad utilizaban PC's, lo de Apple era para 'artistas' y demás gente de mal vivir.

Carolina Pérez no se lo merece

Carolina Pérez ha cometido un error, un error mayúsculo, enorme, imperdonable. Sin embargo, ha reconocido su falta y ha actuado con honra, honor y responsabilidad política. Carolina se ha visto protagonista en el centro de un tornado provocado por una desafortunada elección de palabras, un desliz no sé si originado por el subconsciente colectivo que por desgracia muchos todavía tenemos en Ceuta, y yo me incluyo el primero. Una patina de racismo patente heredada de antiguo contra la que hay que luchar con todas las fuerzas posibles. Por eso, no se puede permitir que un representante de todos los ceutíes realice esas declaraciones en el Senado. Carolina tenía que dimitir, no había otra solución.

La pista de curling más grande del mundo

Nunca he sido demasiado amigo de la noche, al menos en la parte festiva de la misma. No termino de comprender los beneficios de realizar tres actividades (charlar, beber y escuchar música) que puedes desarrollar de forma mucho más amena, barata y saludable en tu propia casa. Y como la verdad es que tampoco me prodigo mucho en la modalidad de caza que se ejerce bajo la luces de los bares, quizás comprendan el por qué no soy asiduo visitante de las madrugadas del Poblado Marinero.

¿Qué fue del fútbol sala?

Acabo de ver en televisión al Club Melilla Baloncesto proclamarse por tercera vez en su historia campeón de la Copa del Príncipe. Y además de gozar de un trepidante partido de baloncesto, he disfrutado con el triunfo del equipo de la ciudad hermana, disfrute que he de reconocer ha ido acompañado de otro sentimiento, la envidia. Envidia sana si quieren, pero envidia al fin y al cabo, no sólo de la victoria sino de la algarabía de un pabellón abarrotado, especialmente de gente joven, ante el triunfo de su equipo, demostrando una vez más que la Marea Azul es una de las mejores aficiones de la LEB. Envidia porque por desgracia es un sentimiento que aquí hace años que abandonamos, en un día en el que una vez más los titulares deportivos se centrarán en el enésimo tropiezo, y esta vez al menos se ha conseguido un empate, de la Asociación Deportiva Ceuta.

Salvemos al hipogrifo

Estoy realmente preocupado. Llevo varios días sin dormir, inquieto, triste. No entiendo cómo la gravedad del problema no abre los informativos, copa las conversaciones en las barras de los bares, arroja cantidades ingentes de furiosas turbas a la calle pidiendo soluciones. Estoy realmente preocupado, por lo que lanzo desde aquí este grito de ayuda, ¡salvemos al hipogrifo!

Qué razón tenía, señor Lobo

Nunca olvidaré aquella tarde en el no menos memorable cine África. El público de la sala se dividía entre los atraídos por la última locura de moda en el mundo del celuloide, los que no tenían ni idea de qué habían ido a ver, y uno que ya había babeado con Reservoir Dogs y esperaba expectante ver aquella maravilla que había puesto Cannes patas arriba. Lo cierto es que, independientemente del origen de cada espectador, de que unos entendiesen y otros no la particular propuesta narrativa, toda la sala estalló en una estruendosa carcajada cuando el Sr. Lobo (Mr. Harvey Keitel) respondía a los halagos de Tarantino, Travolta y Jackson con aquella bofetada de diálogo repetida ya hasta la saciedad. Hoy me he acordado de aquella escena, hoy me he acordado de aquella frase. Hoy también a mí me han entrado ganas de soltar a voz en grito en pleno Salón del Trono “No empecemos a chuparnos las pollas”.

No entienden la guerra

Lo cierto es que no quería escribir este artículo, no entendía necesaria otra aportación desde esta tierra caballa tan lejana de Oriente Medio sobre el conflicto palestino-israelí, pero ante el bloque progre en el que se ha convertido la sección de opinón de este medio, me veo obligado a salir de la cueva, vaya a ser que alguno de nuestros lectores se crea que nos hemos convertido en el panfleto informativo, perdón, en 'Público'.

El mundo cambia, Estados Unidos sigue igual

Desde pequeño he admirado a los Estados Unidos. Su sistema político e institucional es prácticamente perfecto, curioso si se tiene en cuenta que fue el primero desarrollado por una democracia moderna, y nunca ha sido mejorado. Motivos por los que reconozco que siempre me he interesado por las elecciones allá en USA, aunque sin llegar a la obsesión enfermiza con la que los medios de este país se han lanzado a cubrir el acontecimiento. Lo mejor que tienen las elecciones de USA es que ya han acabado, aunque mientras ofrecen su último estertor permítanme una breve opinión motivada por el desconcierto. Y es que no no me queda más que asombrarme y preguntar si es que todo el mundo se ha vuelto loco, o es que definitivamente nadie en este país tiene ni puñetera idea de lo que pasa allende el oceano.

Gracias, señor Garci

Llevo mucho sin escribir en este espacio. Demasiado. Pero los pocos fieles que me queden deberán perdonar que en mi retorno no me esfuerce en denunciar nuevas cacicadas, innumerables maldades, ni dedique mil y un epítetos a mi admirado y nunca siempre lo suficientemente denostado presidente Vivas. No, hoy toca algo distinto. Acabo de escuchar en La Linterna de la Cadena Cope a una de las personas que seguramente más influencia han tenido de forma indirecta sobre mi educación, a uno de los hombres ajenos a mi circulo familiar y más cercano  que más ha tenido que ver para que llegue a ser lo que todavía no estoy muy seguro si soy. A un genio, a un maestro. Acabo de escuchar en la radio a José Luis Garci, y no tengo más remedio que postrarme de rodillas y decir gracias. No, no decir, suplicar gracias. Gracias, señor Garci.Gracias por todo, señor Garci.

Juan Vivas, presidente del PP

No, no se asusten. No voy a anunciar en este artículo que la, según dicen, cada vez mayor brecha existente en la antaño estrecha relación entre Pedro Gordillo y Juan Vivas va a acabar con este último dando un puñetazo sobre la mesa y reclamando lo que en su momento rechazó, la dirección provincial del PP. Aunque muchos crean lo contrario, no tengo micrófonos en Presidencia ni en el PP, y desconozco absolutamente cómo se encuentran las relaciones entre los dos próceres locales más allá de lo que me comentan o pueda barruntar por pequeños detalles. No, con el título hago referencia a una presidencia del PP, cierto, pero no a la de Ceuta precisamente. Y es que en estos días en los que los populares renuevan de forma un poco mermada su confianza en el hombre que puede presumir de haber perdido dos elecciones con el peor presidente de la democracia española, el partido de la gaviota está desaprovechando una oportunidad única. Y es que si se analizan los problemas que según los periodistas, politólogos y los propios afiliados del PP son los que han provocado las dos derrotas consecutivas en los comicios generales, no cabe duda alguna que el hombre ideal para llevar a la formación de nuevo a la gloria es, ni más ni menos, que nuestro estimado presidente, Juan Jesús Vivas Lara.

Me gustan los lunes

¿Cuál es mi día favorito de la semana? Si me hubiese hecho la misma pregunta durante mis años de simple escolar la respuesta hubiese sido fácil y rápida: el viernes. ¿El peor día? El domingo. Supongo que se debe a mi propia forma de ser, siempre pensando más en lo que pasará que en disfrutar el momento en sí. De tal manera, el viernes era el anticipio maravilloso del fin de semana que llegaba, el domingo en cambio era la lápida que marcaba la tumba y el má allá del lunes y el retorno a la rutina. Sin embargo, con los años me he ido atemperando en mi carácter, y poco a poco he aprendido a disfrutar lo que la vida me ofrece en cada instante. De tal forma que el sábado ha ido cada vez más ganando terreno al viernes, y el domingo ha dejado de ser ese día fatídico, supongo que en gran parte también gracias al lenitivo que, al menos de septiembre a febrero, me ofrece mi cada vez más creciente pasión por el fútbol americano. Pero si me preguntan en concreto si me gusta el día marcado por la fría mano del desprecio, el más temido, el más odiado, en definitiva, si me gustan los lunes, la respuesta es un contundente sí, me encantan.

El 9 de marzo

Hace años descubrí una costumbre del periodismo estadounidense que me pareció más que acertada, imprescindible. Consiste en que antes del inicio de una contienda electoral, cada periodista, cada medio, se posiciona de forma clara en favor de uno u otro candidato. Sin medias tintas, sin velos. Una actuación de higiene democrática que permite poder afrontar la campaña con la tranquilidad de que cada palabra, cada artículo, cada frase, no serán analizados hasta el extremo, en busca de ocultos significados tendenciosos. Ceuta al día no puede posicionarse claramente por una opción política, porque como ha quedado explicado en numerosas ocasiones, las ideologías de las distintas personas que componen este proyecto son variadas, por no decir que antagónicas, y el único lema de esta casa ha sido el de la defensa a ultranza de Ceuta y los ceutíes. Como digo, Ceuta al día no puede pronunciarse, pero yo sí. Y lo hago sin dudas, sin ataduras, y sin deber nada a nadie. El próximo 9 de marzo hay que votar al PP.

La desidia del Gobierno

Tras el lamentable espectáculo que supuso el pleno de poco más de un minuto, la portavoz Yolanda Bel anunciaba jactanciosa que las decisiones ya se tomaban en Consejo de Gobierno. Ahora, por lo visto, ni eso. Poco más de diez minutos ha durado la última reunión de los consejeros. Demasiado tiempo para renovar un convenio con las Adoratrices y criticar de nuevo al puerto de Algeciras, por lo mal que tratan a los ceutíes cuando hay temporal. Nada más, ni nada menos. Mientras, Vivas de viaje por Jaén, en el palco de Linarejos viendo el partido de Ceuta, y según dicen pasando el fin de semana en casa de su buen amigo Paco Paris. El Consejo de Gobierno puede esperar. De todas formas, en Ceuta ya no hay problemas.

El pequeño dictador y el Gobierno del 'decretazo'

El pleno está para aprobar presupuestos y ordenanzas, que para el resto nos bastamos nosotros solos sin tener que dar cuentas a nadie, para eso tenemos 19 diputados. No fue con estas palabras exactamente, pero sí era el espíritu que desprendía la declaración de 'Pinocho' Bel tras el que es posiblemente uno de los espectáculos más tristes de la historia política local. El pleno de poco más de un minuto auspiciado por la falta de interés del Ejecutivo ya figura con derecho propio entre los acontecimientos más lamentables que los ceutíes han tenido que sufrir en sus carnes, una bofetada sin remordimiento alguno a la dignidad de una institución que si alguna vez tuvo cierto prestigio ahora debe estar buscándolo sin remisión por esas mismas alcantarillas que se atascan cada vez que llueve un poco más de lo normal. La convocatoria del pleno efectuada por el Ejecutivo de Vivas, refrendada posteriormente por las declaraciones de 'Pinocho' Bel, ha supuesto la firma en el certificado de defunción de este triste cadáver que en Ceuta se llama democracia.

Javol, mein Bel!

Desde hace años afirmo con rotundidad que el Partido Popular de Ceuta ha caído en manos de una panda de rojos que utilizan las siglas de una formación política que costó sangre y lágrimas apuntalar en la ciudad para hacer de su capa un sayo, cometer dislates a troche y moche, convertir el Ayuntamiento en su cortijo particular, saquear sin denuedo y, además, pegar puñalada tras puñalada al ideario político del PP. De vez en cuando me recuerdan que no, que todavían quedan ejemplos de afiliados a las siglas populares en la hoy oscura época anterior al desembarco mesiánico del duo dinámico, Gordillo y Vivas. Apuntan a que Yolanda Bel ya pertenecía a Nuevas Generaciones antes de la gloriosa era Vivas, y por lo tanto es un enlace directo con el pasado del partido. Sin embargo, creo que se equivocan. Si Yolanda Bel enlaza con algo es directamente con la más siniestra historia de regímenes totalitarios que asolaron el planeta durante el siglo pasado.

Los travestis del PP

Las luces se apagan, las velas se encienden. Hace un calor de mil demonios y me siento un poco como Philip Marlowe en el vivero, aunque no sé si dejan tan elevada la calefacción para mantener con vida a las orquídeas o al general Sternwood y el frente juventud. Y entonces aparece él. La música atrona, los aplausos la superan. Con parsimonia y porte erguido cruza la sala él. El único. El inigualable. Don Juan I de Ceuta y II de Jáudenes, gobernante excelso por la gracia de Simarro y Piedra. La masa apenas puede contener la emoción de tributar su alabanza al Cesar. Estas cosas con Jesús no pasaban.

El 'cambio climático', Rajoy y la factura de electricidad de Al Gore

No aguanto más. Llevo todo el día escuchando sandeces a mi alrededor. En la radio, sandeces. En la televisión, sandeces. En los periódicos, sandeces. En la calle, sandeces. Y todo por utilizar el sentido común. Y es que las ya más que celebérrimas declaraciones de Mariano Rajoy sobre el 'cambio climático' y las respuestas a las mismas amenazan con sobrecargarme el cerebro. Y todo porque a don Mariano se le ha ocurrido aseverar algo con lo que comulgaría cualquiera con un mínimo de conocimiento y sesera. Intentar convertir el 'cambio climático' en el mayor problema de este planeta que llamamos Tierra es, ni más ni menos, que, lo adivinan, una sandez.

Extraños intereses

Desde siempre me ha fascinado la figura de William Randolph Hearst. No sé si por culpa de mi también temprana admiración hacia la excepcional ‘Citizen Kane’, la vida del trasunto real del personaje de Welles no puede más que causar asombro y admiración en una persona que, aunque siempre niega su filiación como periodista, se tiene que dedicar a ganarse la vida en esta profesión. La capacidad de Hearst para llevar a cabo sus planes no tenía límites. Desde contratar a golpe de talonario a la redacción del The World de su competidor Joseph Pulitzer, me imagino que el multimillonario debe estar todavía removiéndose en su tumba de pensar que su antagonista de origen húngaro le ha robado protagonismo en la posteridad, a ser el autor de aquella famosa frase que a día de hoy todavía se repite en las facultades de Periodismo de todo el mundo: “Usted facilite las ilustraciones, yo pondré la guerra”.

Una ciudad narcotizada

Mucho tiempo lleva callado este espacio de opinión. Como director y uno de los promotores de este proyecto no puedo más que pedir perdón a los lectores, ya que mi falta no tiene excusa. Sin embargo ha llegado el momento de alzar la voz, ya que la situación en la ciudad comienza a ser insostenible. El Gabinete de Comunicación de la Ciudad, órgano oficial de una institución que representa a absolutamente todos los ceutíes, acaba de difundir una encuesta pagada no se sabe por quién, que glosa los espectaculares resultados electorales que el PP de Pedro Gordillo obtendrá en los próximos comicios. Que desde las filas del PP ceutí se confundan los ámbitos del partido, el Gobierno y las instituciones no es algo nuevo, aunque sí grave. Lo realmente pavoroso es el contenido de dicha encuesta. Según el sondeo de Sigma 2, el presidente Vivas obtiene una nota media de 8, y el 80 por ciento de los ciudadanos califican la labor del Gobierno de buena o muy buena. No nos han dado el dato, pero también sospecho que indican que el señor Vivas mide un metro noventa, es rubio, con ojos azules y en realidad se llama Olaff.